El Supremo de EEUU da la razón a un condenado a muerte que quiere ser fusilado
La inyección letal es el único método de ejecución previsto por la legislación de Georgia, pero el pelotón de fusilamiento existe en otros estados del país
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dado este jueves la razón a Michael Nance, un preso condenado a muerte en el estado de Georgia, que ha pedido morir fusilado en lugar de ser ejecutado con la inyección letal.
Con cinco votos a favor y cuatro en contra, el alto tribunal ha avalado que se cumpla con la voluntad del preso, quien considera que la inyección letal es más dolorosa que el fusilamiento.
La inyección letal es el único método de ejecución previsto por la legislación de Georgia, pero el pelotón de fusilamiento existe en otros estados del país.
La mayoría del tribunal consideró que las personas condenadas a muerte pueden proponer un método de ejecución alternativo que reduzca el «riesgo de dolor severo».
Además, ha sostenido que este método puede ser alguno que esté previsto en un estado diferente al que sentenció al condenado.
Según la prensa local, Nance fue arrestado por asesinato tras robar un banco en 1993. Su defensa argumenta que tiene las venas débiles y que la inyección letal le provocaría un daño insoportable.
En 2017, Georgia ejecutó con inyección letal a un preso que había pedido morir con un escuadrón de fusilamiento, pero por aquel entonces el Supremo se lo denegó.