Máxima tensión en Taiwán: Nancy Pelosi aterriza entre maniobras militares chinas
En estos momentos aviones militares chinos SU-35 están cruzando el estrecho de Taiwán
La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, ha aterrizado esta noche a las 22.43 hora local (16.43 hora española) en el aeropuerto Songshan de Taipéi. La visita de la mandataria americana eleva la tensión a máximos en décadas, ya que China había avisado de que si esta visita se producía responderían militarmente.
A su llegada, tras un viaje de siete horas que ha comenzado en Kuala Lumpur (Malasia) y en el que ha esquivado el Mar de China Meridional y ha sobrevolado Indonesia y Filipinas, Pelosi fue recibida por el ministro de Asuntos Exteriores de la isla, Joseph Wu Chao-hsieh y por la directora del Instituto Estadounidense de Taiwán, Sandra Oudkirk.
Pelosi ha afirmado en su cuenta de Twitter minutos después de aterrizar que su visita «honra el compromiso inquebrantable de Estados Unidos con el apoyo a la vibrante democracia taiwanesa».
La funcionaria ha añadido que su viaje «no contradice las políticas mantenidas desde hace un largo tiempo por Estados Unidos» y que su país «se opone a esfuerzos unilaterales para alterar el statu quo».
Momentos previos al aterrizaje de Pelosi, aviones militares chinos SU-35 comenzaron a cruzar el estrecho de Taiwán, según han informado medios estatales del país asiático. Además, tal y como acaba de informar el ministerio de Defensa chino, el gobierno se encuentra en «alerta alta» y pondrán en marcha unas contramedidas que consisten en «una serie de operaciones militares orientadas».
Ante este hecho, un portavoz de la Casa Blanca ha afirmado que Estados Unidos está «preparado» para la respuesta que tenga China por la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, un viaje que ha molestado a Pekín.
«Estados Unidos no busca ni quiere una crisis. Estamos preparados para gestionar lo que Pekín decida hacer», dijo en una rueda de prensa en la Casa Blanca el director de Comunicaciones del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
Este martes, la Cancillería china ha asegurado que es «difícil imaginar una acción más temeraria y provocadora» por parte de Estados Unidos que esta visita, contra la cual el Ejército chino ya advirtió recientemente de que no se «quedaría de brazos cruzados».
Asimismo, el ministerio de Exteriores de China ha condenado la visita de la mandataria a la isla. Desde el organismo afirman que «ha enviado una señal errónea a los separatistas que buscan la independencia de Taiwán».
La visita de Pelosi a Taiwán ha permanecido fuera de su itinerario público hasta el último momento, lo que ha avivado la incertidumbre y ha puesto en alerta a los Ejércitos chino y taiwanés, que han incrementado su preparación de combate a lo largo de la jornada.
Su llegada a la isla se produce en el marco de su gira por Asia, que la ha llevado previamente a Singapur y Malasia. Además, es la primera por parte de un presidente de la Cámara de Representantes en 25 años.
El gigante asiático considera a Taiwán como su provincia rebelde a pesar de que la isla ha declarado su independencia y cuenta con el apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea.
El principal edificio de Taipei, la capital del país, se ha iluminado dando la bienvenida a Pelosi, así como ilustrando mensajes de amistad con Estados Unidos.
La Casa Blanca afirma que no hay ninguna violación con la visita
La Casa Blanca ha asegurado este martes que «no hay ninguna violación o problemas de soberanía» con la visita de la presidenta de la Cámara Baja de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán.
El coordinador de Comunicaciones del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo en una entrevista con la cadena de televisión CNN que su país no apoya la independencia de Taiwán y que la visita de Pelosi únicamente «reafirma la política de una sola China», defendida por Pekín.
La Armada de EEUU tiene embarcaciones con cazas F-35
La Armada de Estados Unidos tiene operando cerca de Taiwán al portaaviones USS Ronald Reagan y el barco anfibio USS Tripoli, con cazabombarderos F-35, coincidiendo con la visita de la presidenta de la Cámara Baja estadounidense, Nancy Pelosi.
Según la última actualización de USNI News Fleet and Marine Tracker, que es una publicación de la asociación militar independiente Instituto Naval de EEUU, hay otra embarcación estadounidense, USS America, en camino, pero que aún se encuentra en el puerto de Sasebo en Japón.
Rusia e Irán critican la visita de Pelosi
Rusia ha calificado la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán como «otro movimiento provocativo» de la Administración Biden para presionar a China, mientras que Irán ha cargado contra Washington y ha señalado que dicho viaje viola la integridad territorial del gigante asiático.
«Los trabajadores temporales políticos estadounidenses irresponsables insultan a los 1.500 millones de habitantes de China. Estados Unidos es un estado provocador», ha expresado la portavoz del Ministerio de Exteriores, Maria Zajarova, tal y como ha recogido la agencia de noticias TASS.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Naser Kanani, ha condenado este martes la situación y ha indicado en rueda de prensa que viola la integridad territorial de China y va en contra de la Carta de Naciones Unidas, según ha recogido la agencia de noticias Mehr.
Biden y Xi Jinping hablaron el jueves por teléfono
El presidente chino, Xi Jinping, hablaron por teléfono el jueves con su homólogo estadounidense, Joe Biden, en medio de las tensiones ante una posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán.
Biden indicó la semana pasada que el Ejército de Estados Unidos no considera que la visita de Pelosi sea buena idea, mientras que el portavoz del Ministerio de Defensa de China, Tan Kefei, advirtió de que el Ejército chino no se quedará de brazos cruzados ante la posible visita de un representante estadounidense a la isla.
China considera a Taiwán una provincia rebelde, pese a que la isla ha declarado su independencia y cuenta con el apoyo de Estados Unidos y la UE. En este contexto, la posible visita de Pelosi, que podría ocurrir en agosto, tendría un alcance histórico porque sería la primera presidenta de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos que viajaría a Taiwán desde el republicano Newt Gingrich en 1997.