Castillo disuelve el Congreso, instaura un Gobierno de emergencia nacional y convoca elecciones en Perú
La decisión llega horas antes de que el Parlamento debatiera una moción de censura en su contra que podría haberle apartado de la jefatura del Estado
La decisión llega horas antes de que el Parlamento debatiera una moción de censura en su contra que podría haberle apartado de la jefatura del Estado
El presidente de Perú, Pedro Castillo, decretó este miércoles disolver temporalmente el Congreso e instaurar un Gobierno de emergencia nacional, horas antes de que el Parlamento debatiera una moción de vacancia (destitución) en su contra que podría haberle apartado de la jefatura del Estado.
«Se dictan las siguientes medidas: Disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional», dijo Castillo en un mensaje a la nación que no fue previamente anunciado por su equipo de comunicaciones o en sus redes sociales. Con un temblor evidente en sus manos, anunció que también dicta «convocar en el más breve plazo a elecciones para un nuevo congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de 9 meses».
También ordenó un toque de queda a nivel nacional a partir del día de hoy desde las 22 horas (3.00 GMT del jueves). «Se declara en reorganización del sistema judicial el Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia (JNJ) y el Tribunal Constitucional (TC)», agregó.
Castillo añadió que «todos los que poseen armamento ilegal deberán entregarlo a la Policía Nacional en el plazo de 72 horas» y que «quien no lo haga comete delito sancionado con pena privativa de la libertad que se establecerá en el respectivo decreto ley». También dictó que Policía Nacional, «con auxilio de las Fuerzas Armadas, dedicarán los esfuerzos al combate de delincuencia, corrupción y narcotráfico, a cuyo efecto se les dotará de los recursos necesarios».
Finalmente, hizo un llamado a todas las instituciones de la sociedad civil, rondas campesinas (grupos de autodefensa fortalecidos durante el conflicto armado interno) «y todos los sectores sociales» a que salgan a defender estas medidas. Señaló que comunicará esta decisión a la Organización de Estados Americanos (OEA).
Los legisladores de diferentes bancadas del Congreso de Perú denunciaron que el presidente Castillo ha dado un golpe de Estado al anunciar que dicta la disolución del Parlamento y la conformación de un «gobierno de emergencia» en el país. «Esta decisión configura un golpe de Estado y se aleja de todos los marcos constitucionales«, declaró la legisladora izquierdista Ruth Luque, cuya agrupación ha apoyado habitualmente la permanencia de Castillo en el poder.
La parlamentaria agregó que la decisión del gobernante «es claramente un golpe al estilo del 92», en referencia al «autogolpe» que dio en 1992 el entonces presidente Alberto Fujimori (1990-2000), que también disolvió el Congreso. Luque remarcó que «es un gobierno que no representa a los marcos constitucionales» y quiere «imponer un régimen de excepción».
El congresista derechista José Cueto, del partido ultraconservador Renovación Popular y excomandante de las Fuerzas Armadas, afirmó que «por supuesto que es un golpe de Estado» y que las Fuerzas Armadas «respaldan al Congreso». «Por supuesto que es un golpe de Estado, (Castillo) estaba temblando, sabía que iba a ser vacado (destituido) y se ha adelantado. Espero que las Fuerzas Armadas se pronuncien en contra del golpe de Estado, no puede cerrar el Congreso», enfatizó.
La fujimorista Martha Moyano coincidió en que se trata de un golpe de Estado y aunque pidió guardar «la calma», dijo que se debe «alzar la voz, decir las cosas como son». La parlamentaria derechista Norma Yarrow aseguró que Castillo «está solo en su despacho» y llamó a la vicepresidenta Dina Boluarte para que asista al Congreso y asuma la jefatura del Estado para «no permitir que este delincuente Pedro Castillo pueda atentar contra la democracia».
Fuente: EFE