El Parlamento georgiano retoma la polémica ley de agentes extranjeros que desató protestas
La oposición y parte de la sociedad se manifestó en contra de esta propuesta por ser una muestra de simpatía con Rusia
El partido Sueño Georgiano, la principal formación política del Parlamento de Georgia y partido de gobierno, ha anunciado este miércoles que retomará en la Cámara el polémico proyecto de ley sobre agentes extranjeros, una propuesta que ya en marzo de 2023 provocó una fuerte ola de protestas.
Así lo ha confirmado el líder de Sueño Georgiano en el Parlamento, Mamuka Mdinaradze, quien ha detallado que aunque el contenido del proyecto sigue siendo el mismo, se ha abandonado la expresión «agente de influencia extranjera» para adoptar la de «organización que defiende los intereses de una potencia extranjera».
«La mayoría parlamentaria ha decidido volver a presentar al Parlamento el proyecto de ley (…) que se presentará en el Parlamento de Georgia con exactamente el mismo texto que el año pasado», ha manifestado Mdinaradze durante una rueda de presa, según recoge el portal de noticias Civil.
Ya el año pasado la oposición y parte de la sociedad se manifestó en contra de esta propuesta legislativa por ser una muestra de simpatía con Rusia. El Gobierno, por su parte, rechazó estas acusaciones y defendió que la propuesta serviría para simplemente tener un listado de organizaciones financiadas desde el extranjero.
Futuro en la UE
La noticia ha sido bien recibida por el primer ministro georgiano, Irakli Kobajidze, quien ha incidido en que la ley remará en favor de avanzar hacia la membresía de la Unión Europea, pues favorecerá la transparencia en el país y pondrá fin «al radicalismo y la polarización» en organizaciones y medios de comunicación.
«Cuando se tiene razón y no se pretende estropear la nada, la transparencia y la rendición de cuentas son las mejores formas de evitar vicios y errores. Para mí, la transparencia significa europeidad, y la opacidad significa no europeidad», ha aseverado el jefe de Gobierno en su perfil oficial de Facebook.
En este sentido Kobajidze ha señalado que no es de extrañar que los estudios sociológicos apunten que las organizaciones no gubernamentales gozan de la menor confianza de la población de entre todas las instituciones estatales y sociales de Georgia. «La ley contribuirá significativamente a superar este mal», ha dicho.
Por otro lado, la presidenta georgiana, Salomé Zurabishvili, ha condenado esta decisión del partido gubernamental, a quien ha acusado de tratar de sabotear las aspiraciones europeístas del país con una propuesta legislativa que, según considera ella y el conjunto de la oposición, es de corte ruso.
Zurabishvili ha acusado al Gobierno de avanzar en dirección contraria a la UE no solo con esta medida, sino también con su negativa a llevar a cabo reformas en materia judicial, oponerse a simplificar el voto de los inmigrantes, y rechazar la aplicación de medidas anticorrupción.
Así las cosas, la mandataria georgiana ha aseverado que, ante esta «grosería y gran insulto a Georgia», las formaciones políticas opositoras deben «ir a las elecciones bajo una bandera europea, quizás con varios partidos, pero bajo una sola bandera». «Debemos expresar nuestra voz europea a través de las elecciones», ha zanjado la presidenta Zurabishvili en referencia a las próximas elecciones parlamentarias en Georgia, previstas para finales del mes de octubre.
En marzo de 2023, tras varios días de manifestaciones y disturbios en contra de la legislación, los partidos gubernamentales Sueño Georgiano y Poder del Pueblo anunciaron la retirada del polémico proyecto de ley a pesar de que el borrador había obtenido ya un primer visto bueno en el Parlamento.
Las fuertes protestas desatadas contra la legislación se saldaron con decenas de personas detenidas –acusadas de desorden público y desobediencia a las autoridades por no seguir las órdenes de los agentes de seguridad– y medio centenar de agentes de Policía heridos en Tiflis, la capital.