Imputado por intento de asesinato el hombre que tiroteó al primer ministro de Eslovaquia
Rober Fico fue trasladado al hospital, donde permanece en estado «estable, pero grave» tras cinco horas de operación
El detenido por el tiroteo al primer ministro de Eslovaquia | Radovan Stoklasa (Reuters)
Las autoridades de Eslovaquia han imputado este jueves por intento de asesinato al hombre que abrió fuego el miércoles contra el primer ministro, Robert Fico, quien fue trasladado inmediatamente a un hospital, donde permanece en estado «estable, pero grave». La Policía ha presentado cargos a primera hora del día contra el detenido, identificado como Juraj Cintula, quien se expone a una pena de 25 años de cárcel. El hombre se encuentra en una celda en la cárcel de Nitra, según la cadena de televisión Markiza TV.
Según las informaciones recogidas por este medio, el hombre habría actuado por venganza en relación con las políticas del actual Gobierno. El sospechoso habría comunicado a la Policía que planificó el ataque días antes, si bien ha negado que su objetivo fuera asesinar a Fico, sin que las autoridades se hayan pronunciado al respecto.
El ministro de Defensa eslovaco, Robert Kalinak, había indicado horas antes que el estado de Fico sigue siendo «grave», mientras que la directora del hospital en el que se encuentra detalló que fue operado durante cinco horas. Medios locales indican que a primera hora del día Fico ha podido comunicarse con otras personas, sin más detalles.
El primer ministro, cercano a las posiciones del Kremlin, fue trasladado de urgencia en helicóptero desde la ciudad de Handlova (centro) hasta el Hospital Roosevelt de Banská Bystrica tras el suceso. Cintula sería un escritor de 71 años miembro de la Asociación de Escritores Eslovacos y fundador de un grupo literario.
Fico juró a finales de octubre el cargo como primer ministro de Eslovaquia por cuarta ocasión tras su dimisión en 2018, cuando se produjeron una serie de protestas por el asesinato del periodista Jan Kuciak, que investigaba las actividades de la mafia italiana en el país. Su nombramiento estuvo rodeado de polémica y críticas por su postura prorrusa en plena invasión de Ucrania.
