Nuevos registros en el Parlamento Europeo por intento de injerencia rusa en las elecciones
La Fiscalía belga dice que hay pruebas de que se intentó pagar a eurodiputados por difundir propaganda rusa
Las autoridades belgas han informado de nuevos registros en las sedes del Parlamento Europeo en Bruselas y Estrasburgo en el marco de una investigación iniciada en abril por presunta injerencia rusa y corrupción con el objetivo de influir en las elecciones europeas del próximo junio.
Las pesquisas tienen lugar este mismo miércoles en el domicilio que un «colaborador» del Parlamento Europeo tiene en el distrito bruselense de Schaerbeek, según ha informado la Fiscalía federal belga, sin dar más detalles de la identidad del asistente investigado salvo que jugó un «papel importante» para que la trama se acercara a miembros de la Eurocámara.
También ha habido registros en las oficinas de esta persona en la sede de la Eurocámara en Bruselas por orden del juez que instruye la investigación de una presunta trama para acercarse y comprar a miembros del Parlamento Europeo para que difundieran contenidos de la web «Voice of Europe», un sitio web de extrema derecha y propaganda rusa.
En el marco de la misma investigación, y en colaboración con Eurojust y las autoridades judiciales francesas, se ha llevado a cabo otro registro en el despacho del asistente en la sede de la institución europarlamentaria en Estrasburgo.
El expediente abierto en abril abarca sospechas de injerencia, corrupción pasiva y pertenencia a organización criminal, según recuerda en el comunicado la Fiscalía belga, que precisa que hay pruebas de que la trama se acercó a miembros del Parlamento Europeo para «pagarles por promover la propaganda rusa a través de ‘Voice of Europe’» y que, para ello, el colaborador ahora investigado desempeñó un «papel importante».
Fuentes parlamentarias consultadas por Europa Press confirman el acceso de las autoridades a una oficina en el Parlamento europeo en el marco de la «plena cooperación» que la institución ofrece siempre a las autoridades judiciales y en cumplimiento de la ley.
En abril, fue el primer ministro de Bélgica, Alexander de Croo, quien reveló el inicio de la investigación por presunta injerencia rusa por parte de la Fiscalía federal tras constatar los servicios de inteligencia movimientos delictivos para tratar de influir en el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo que se celebrarán del 6 al 9 de junio en toda la Unión Europea.