El papa Francisco se plantea realizar un viaje a Canarias: «Querría estar cerca del pueblo»
«Allí está la situación con los migrantes que llegan y querría estar cerca de los gobernantes y el pueblo», ha asegurado
El papa Francisco ha confirmado este viernes que está pensando en viajar a Canarias por la crisis migratoria que viven las islas y para mostrar su «cercanía a los gobernantes y al pueblo», en la rueda de prensa a bordo del avión de regreso de su gira por Asía y Oceanía.
«Pienso un poco en esto, en ir a Canarias porque allí está la situación con los migrantes que llegan del mar y querría estar cerca de los gobernantes y el pueblo de Canarias», ha dicho el papa al ser preguntado por una posible visita a las islas, por ejemplo como escala en un hipotético viaje a Argentina.
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, invitó al Pontífice a visitar el archipiélago para conocer la realidad migratoria el pasado mes de enero, cuando se reunió con él en el Vaticano. Francisco ya había hablado de la posibilidad de viajar a Argentina durante el segundo trimestre del año y Clavijo le sugirió hacer escala en Canarias.
En el caso de que finalmente se produjera este viaje, que no ha sido confirmado todavía de forma oficial por el Vaticano, sería la primera visita de Francisco a España, pero la novena que lo visita un Pontífice. San Juan Pablo II estuvo en España en cinco ocasiones y tres lo hizo Benedicto XVI, la última de ellas en 2011 para la JMJ de Madrid.
Más de 25.500 migrantes han llegado a Canarias de forma irregular en 2024, un 123% más que en el mismo periodo de 2023, según el último balance del ministerio del Interior hasta el pasado 31 de agosto. Además, el archipiélago afronta las dificultades de atender a 6.000 menores migrantes solos, lo que excede ampliamente su capacidad de acogida.
En relación a las migraciones, Francisco ha señalado que no acoger a los migrantes «es un pecado» y ha señalado que el Antiguo Testamento ofrece un modelo claro de quién debe ser acogido: «el huérfano, la viuda y el forastero».
«A ellos debía proteger el pueblo de Israel. Quien no protege al emigrante falta, es un pecado. También es un pecado contra la vida de esas personas», ha señalado tras explicar que durante su visita a Estados Unidos en 2015 celebró una misa en El Paso, cerca de la frontera entre México y Estados Unidos.
Francisco ha recordado que vio los zapatos de muchos migrantes que intentaron cruzar a Estados Unidos, pero cuyo viaje «terminó mal allí». Así, ha afirmado que hoy hay un flujo migratorio dentro de Centroamérica en el que a veces las personas son tratadas «como esclavos, porque se lucra con ellos». «La inmigración es un derecho, un derecho que está en las sagradas escrituras», ha señalado. Asimismo, ha asegurado que expulsar a los emigrantes es una práctica «terrible» que comporta «maldad».
Sobre otros futuros planes de viaje, el Papa también ha dejado claro que no asistirá a la misa de inauguración para la reapertura de la catedral de Notre Dame en París, después de que un incendio destruyera partes del edificio en 2019.