Los investigadores logran entrar en Duma, uno de los focos del ataque químico en Siria
Los expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) han logrado entrar este sábado finalmente en Duma para investigar el presunto ataque químico del 7 de abril en Siria tras esperar una semana en Damasco por la falta de garantías de seguridad. Los investigadores llegaron a Damasco el pasado sábado con planes de entrar de inmediato a Duma para recoger las muestras que confirmen o desmientan el presunto ataque, pero las autoridades sirias y rusas se lo impidieron alegando «falta de seguridad».
Los expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) han logrado entrar este sábado finalmente en Duma para investigar el presunto ataque químico del 7 de abril en Siria tras esperar una semana en Damasco por la falta de garantías de seguridad. Los investigadores llegaron a Damasco el pasado sábado con planes de entrar de inmediato a Duma para recoger las muestras que confirmen o desmientan el presunto ataque, pero las autoridades sirias y rusas se lo impidieron alegando «falta de seguridad».
El pasado martes, funcionarios del departamento de Seguridad de la ONU entraron en Duma para supervisar el terreno, antes de dar luz verde a los expertos de la OPAQ. Sin embargo, se enfrentaron a dos situaciones que pusieron en riesgo su seguridad y les obligaron a abandonar la ciudad: un tiroteo con armas ligeras y la explosión de un artefacto.
Ante esta situación, regresaron a Damasco para negociar con las autoridades sirias y conseguir una escolta para los expertos que este sábado, finalmente, visitaron uno de los lugares atacados para recoger pruebas que serán analizadas antes de emitir un informe.
La OPAQ ha explicado que evaluará la situación en la localidad y considerará «los pasos futuros», incluida otra posible visita a Duma para obtener más pruebas. Las muestras recogidas se transportarán al laboratorio de la OPAQ en Rijswijk, cerca de La Haya -donde se encuentra la sede de la organización- y luego se enviarán para su análisis comparativo a otros laboratorios de la organización, un procedimiento habitual en las investigaciones. Una vez obtenidos los resultados, elaborará un informe que entregará a los Estados parte, según el comunicado, que no especificó una fecha prevista para la publicación de las conclusiones.
El viceprimer ministro ruso de Exteriores, Mikhail Bogdanov, explicó el pasado jueves que son «los rebeldes sirios» los que están impidiendo el acceso de los investigadores. Esta explicación contrasta con la de la Comandancia General de las Fuerzas Armadas Sirias, que aseguró el sábado pasado que el régimen tiene el control total de Guta Oriental, donde se sitúa Duma, y que esta localidad estaba «libre de terroristas».
«Creemos que Rusia podría haber visitado ya el lugar del ataque. Nos preocupa que pueda haber manipulado el emplazamiento con la intención de frustrar los esfuerzos de la OPAQ», afirmó por su parte la delegación estadounidense en la OPAQ. Ante las dificultades que tuvieron los expertos de la OPAQ para entrar a Duma y como alternativa, el Gobierno sirio, que niega el uso de armamento prohibido contra la población civil, ofreció al equipo realizar desde Damasco entrevistas con 22 supuestos testigos de lo ocurrido.
El mandato de la OPAQ en esta investigación se limita a determinar si hubo uso o no de armamento prohibido porque este organismo no tiene autorización para señalar al atacante, incluso si cuenta con las pruebas suficientes para identificarlo.
Por este supuesto ataque químico, Francia, Estados Unidos y el Reino Unido bombardearon la semana pasada con misiles instalaciones gubernamentales en las que presuntamente se producían y almacenaban armas químicas.