Italia retiene al barco de Open Arms tras rescatar a 218 migrantes en el Mediterráneo
El gobierno italiano mantiene retenido desde el domingo el barco de la organización humanitaria española Proactiva Open Arms, después de rescatar a 218 migrantes en las costas de Libia y trasladarlos a Sicilia.
El gobierno italiano mantiene retenido desde el domingo el barco de la organización humanitaria española Proactiva Open Arms, después de rescatar a 218 migrantes en las costas de Libia y trasladarlos a Sicilia.
«Todavía es solo una hipótesis de delito. La toma del barco es preventiva, pero se nos acusa de asociación criminal y fomentar la inmigración ilegal por desobedecer a los libios al no entregarles mujeres y niños», explica el fundador de la ONG, Oscar Campos, en su cuenta de Twitter.
La tripulación, ha dicho Campos, se encuentra desde el domingo a bordo del barco en el puerto siciliano de Pozzallo, a donde llegó tras rescatar a 218 personas a 70 millas de Libia. El fundador de la ONG española se ha mostrado sorprendido al tiempo que ha lamentado que rescatar vidas sea un delito.
Open Arms es una ONG dedicada al rescate de personas en alta mar. «No deberíamos olvidar que no solo son los derechos humanos de las personas que huyen en busca de refugio los que están en juego, son los derechos de todos los ciudadanos de la Unión Europea los que se están vulnerando», añade Campos.
Para el fundador de Open Arms, lo que pretende el gobierno de Italia con su acción y su acusación contra el barco de la ONG es «llevar a cabo una devolución en caliente«, a un país como Libia que no ofrece ningunas garantías para la seguridad de los ciudadanos que huyen de las guerras y la pobreza, jugándose la vida tratando de cruzar el Mediterráneo para llegar a Europa.
Impedir el rescate de vidas en peligro en alta mar con el fin de devolverlas por la fuerza a un país no seguro -como es Libia- equivale a llevar a cabo una devolucion en caliente, contraviene el Estatuto de los Refugiados de la ONU pic.twitter.com/AgADbQ8Ttp
— Oscar Camps (@campsoscar) 18 de marzo de 2018
El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, ha asegurado que las autoridades consulares trabajan para intentar «despejar cualquier problema», y ha remarcado que «tenemos desde ayer al consulado en Nápoles y al cónsul honorario en Catania en contacto con el capitán del barco y con los responsables de la ONG, que ya tienen una abogada allí, y están trabajando para aclarar los extremos de las acusaciones y despejar cualquier problema que haya».
Dastis ha realizado esas declaraciones a su llegada a la reunión de titulares de Exteriores de los Veintiocho que se celebra este lunes en Bruselas
Por su parte, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, ha reclamado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que exija al presidente de la República Italiana que «deje de retener el barco con bandera española» que «no hace otra cosa que rescatar a personas que van a morir en aguas del Mediterráneo».
Penas de entre 4 y 7 años de prisión
El fundador de la ONG Pro Activa Open Arms, Òscar Camps, ha asegurado que los tres miembros de la tripulación del barco de rescate de inmigrantes encausados en Italia «se enfrentan a penas de entre 4 y 7 años de prisión», por lo que ha subrayado que ahora la prioridad es «luchar para que no sean detenidos».
Los argumentos de las acusaciones contra los tripulantes del barco atracado en Italia son una excusa con el objetivo de «bloquear la intervención de las organizaciones humanitarias» en el mar Mediterráneo, ha dicho Camps.
Todavía es solo una hipótesis de delito. La toma del barco es preventiva, pero se nos acusa de asociacion criminal y fomentar la inmigración ilegal por desobedecer a los libios al no entregarles mujeres y niños pic.twitter.com/F9ww0axFMD
— Oscar Camps (@campsoscar) March 18, 2018
En rueda de prensa, ha explicado que por primera vez la organización ha tenido que pedir ayuda al gobierno español para poder atracar en un puerto. En concreto, el fundador de la ONG ha explicado que la organización contactó con el cónsul español en Sicilia y fue el gobierno español quien negoció con el ejecutivo italiano que la embarcación pudiera atracar en el puerto de Pozzallo, informa Efe.