La UE advierte de la presión y las amenazas que sufren las ONG en toda Europa

Las ONG y las organizaciones sociales en Europa están siendo sometidas a distintos tipos de presión, desde restricciones en su financiación a obstáculos legales e incluso agresiones físicas, una situación que la Unión Europea (UE) califica de «inaceptable» en un informe publicado este jueves, informa Efe.

Cambios en la legislación o una inadecuada aplicación de las leyes, obstáculos para acceder a financiación, ataques y descalificaciones son algunas de la situaciones que denuncia la Agencia de Derechos Fundamentales (FRA) de la Unión Europea en su documento.

Las ONG y organizaciones de la sociedad civil han informado de que se ha vuelto más difícil para ellas contribuir a la protección de los derechos humanos en la Unión Europea. «Una democracia próspera necesita de una saludable sociedad civil. Desafortunadamente, la sociedad civil de la propia Unión Europea se enfrenta a un patrón de amenazas y presiones en muchas partes del continente», denuncia al respecto Michael O’Flaherty, director de la FRA.

El informe, basado en versiones de las más de las 500 ONG con las que la FRA colabora, define cuatro situaciones problemáticas, que se dan con más o menos gravedad en los distintos países: amenazas y ataques, cambios legales, problemas de financiación y falta de implicación de la sociedad civil. «Afrontar esta inaceptable situación es una alta prioridad para los legisladores a nivel de la UE y nacional», ha dicho O’Flaherty.

Esta situación ha empeorado en los últimos años, en especial desde 2013, cuando se dieron las primeras alarmas, explica Waltraud Heller, una de las autoras del informe. «Hungría y Polonia han salido mucho en los medios. Pero hay otros países en los que también existen estos problemas y no son tan evidentes». En concreto, la experta explica que los cambios legales que han afectado a las organizaciones tienen que ver con leyes antiterroristas o de seguridad.

Esas leyes restringen libertades como el derecho de reunión, como ocurre en Francia tras la declaración del estado de emergencia; permiten la prohibición de una ONG con una vaga justificación, como es el caso de Bulgaria; o limitan el derecho de reunión pública, como en España.

Críticas a las ONG en el Mediterráneo

Por otra parte, el informe recoge varios ejemplos de ataques y amenazas, como el que padeció en 2014 la ONG española SOS Racismo, o los sufridos por grupos de defensa de los derechos de los homosexuales en Polonia.

Heller ha aprovechado para nombrar aquellos mensajes de rechazo hacia las organizaciones que rescatan a refugiados en el mar Mediterráneo, que son acusadas por algunos países de favorecer el tráfico de personas.