La violencia infantil se ha cuadruplicado desde 2009 y las víctimas son cada vez más jóvenes
La violencia contra se ha multiplicado por cuatro desde 2009 y se realiza con más frecuencia, durante más tiempo y con más gravedad desde la propia familia a niños cada vez más pequeños. Son los datos más relevantes del “Estudio sobre la Evolución de la Violencia a la Infancia en España según las víctimas 2009-2016”, presentado este jueves por la Fundación ANAR, en el cual se reflejan las 38.439 llamadas recibidas en el teléfono ANAR durante esos años y el incremento de un 298,8% que esto supone.
La violencia contra los menores de edad se ha multiplicado por cuatro desde 2009 y se realiza con más frecuencia, durante más tiempo y con más gravedad desde la propia familia a niños cada vez más pequeños. Son los datos más relevantes del “Estudio sobre la Evolución de la Violencia a la Infancia en España según las víctimas 2009-2016”, presentado este jueves por la Fundación ANAR, en el cual se reflejan las 38.439 llamadas recibidas en el teléfono ANAR durante esos años y el incremento de un 298,8% que esto supone.
Las llamadas conllevaron un total de 25.312 casos de violencia contra un menor, 3.605 de los cuales requirieron una intervención urgente del Teléfono Anar con las fuerzas de seguridad del Estado y/o con los servicios de emergencias. Las principales víctimas son las niñas, ya que constituyen el 57,3% de los casos, objeto de la violencia de género y de los abusos sexuales.
Especialmente alarmante es el aumento de la violencia de género, que los menores viven en su mismo entorno familiar o que se dirige principalmente a las adolescentes, así como el maltrato psicológico, multiplicado por siete en los ocho años que recoge el informe.
Destaca también la violencia de un adulto a un menor, que se ha multiplicado hecho por seis; el ciberacoso y el grooming, por cinco; y el maltrato físico, por cuatro, según ha informado la directora del Teléfono ANAR, Diana Díaz. Los abusos sexuales, por su parte, casi se han triplicado, y tres de cada cuatro han sido contra niñas. Lo mismo ha ocurrido con los menores que han sido echados de casa y con aquellos que han sufrido violencia en la escuela, mientras que los problemas de conducta se han incrementado un 136%, las agresiones extrafamiliares un 93% y el abandono un 73%.
En cuanto a la edad media de las víctimas, ha pasado de ser 12,3 años a 11,5 años, algo que ha ocurrido a la par con la edad de inicio, pues antes las agresiones comenzaban a los 10,4 años y ahora lo hacen a los 9,6. El número de casos producidos entre los 5 y los 12 años se ha situado en un 22%, casi siete puntos porcentuales más que en los años anteriores a 2009. El 58,6% de las ocasiones es la propia familia la agresora, y la mitad de las veces son los propios progenitores, aunque suele ser el padre el responsable de uno de cada tres casos. Por detrás irían las madres, aunque ha descendido significativamente, pasando de 37,6% a 24,2%.
La edad de las víctimas ha disminuido, cada vez son más pequeños los #niños, #niñas y #adolescentes que sufren cualquier forma de violencia, la edad media se sitúa ahora en los 11,5 años (antes 12,3%) #ObjetivoANAR para @A3Noticias pic.twitter.com/Iatkersbqh
— Fundación ANAR (@FundacionANAR) 15 de marzo de 2018
De las víctimas infantiles, la fundación ha señalado que una de cada diez ha pensado en suicidarse o se ha autolesionado. Los intentos de suicidio se han multiplicado por seis y las lesiones propias por 14. De estos niños, son un 5,4% los que han terminado quitándose la vida frente al 0,8% que lo hizo en 2009.
Actualmente ha aumentado la frecuencia de las agresiones y ya un 62,2% son a diario. Más de la mitad se prolonga durante más de un año y, el 98,5% de las veces, su gravedad es alta o media. La violencia física sigue siendo habitual, y la más “fuerte” ha subido hasta llegar al 27,1%, pues en un tercio de los casos se producen lesiones, golpes, bofetadas, puñetazos y patadas, además de amenazas graves, coacciones y gritos, que derivan en traumatismos, huesos rotos o contusiones fuertes en el 6,7% de los casos.
Además, los insultos se han disparado 13 puntos, llegando así los 44,8%, aunque los que más han subido han sido el acoso y el control (del 16,8% al 28,9%), el maltrato psicológico a través de desprecios y humillaciones (del 18,1% al 25,4%) y el ciberacoso (del 5,1% al 12,9%), informa Efe.