Qué músculos trabajar de manera exprés (y sencilla) para lucir en verano: son cuatro
Estás a tiempo de hacer los deberes. Quizá no para sacar un sobresaliente en físico, pero al menos para ir a por el aprobado
Ah, otro verano más se asoma a la puerta y a ti te ha vuelto a pillar el toro en un tono físico que no se convertirá en portada de revista. No te preocupes, no venimos a juzgar a nadie y sí a dar soluciones con varios músculos fáciles de trabajar que, con un poquito de empeño, aún pueden deslumbrar en verano.
Olvidemos los milagros, eso sí. El ejercicio físico, más allá de servirnos para lucir bien —que es el menor de sus beneficios—, nos vendrá de maravilla para ser más funcionales, cansarnos menos y ser más longevos. Luego ayuda también a salir mejor en las fotos, ciertamente, pero el fin principal de ponernos en forma no debería ser nuestro posado veraniego.
Ayuda, sobre todo si tenemos en cuenta que hay ciertos músculos y grupos musculares que suelen ser más fáciles de trabajar. Puede ser porque siempre estén en marcha o puede ser porque necesiten muy poco trabajo para esa tonificación, pero resultan relativamente sencillos de realzar aún llegando tarde.
Insistiendo en olvidar la milagrería, comprendamos que no podemos en un mes tener un cuerpo de superhéroe, pero sí de sentar ciertas bases. Nombres que nos suenan a todos como bíceps, tríceps, trapecios, dorsales, abdominales o gemelos entran en esta colección de pretensiones, pero ¿realmente cuáles podemos desarrollar en poco tiempo?
También dejemos claro otro matiz: estos músculos no hace falta trabajarlos siempre en el gimnasio. Aparquemos el mito de ‘no tengo tiempo’ y que eso suponga una excusa para que no nos pongamos relativamente en forma. Una habitación en casa, algún juego de mancuernas o de gomas elásticas y un poco de tiempo servirán para ponernos en marcha.
Qué músculos trabajar de manera exprés para lucir en verano
No hace falta una sesión especialmente intensa, aunque aclaramos que esta serie de ejercicios no se convierten en una garantía final. Su finalidad está orientada a definir ligeramente ciertos grupos musculares y alcanzar una tonificación que aporte algo de firmeza. Olvidemos las pretensiones de hipertrofia o de alcanzar un gran volumen en cuestión de semanas porque eso es virtualmente imposible.
También convendrá explicar que hay músculos que, aún cotidianos, son fáciles de tonificar pero que, por otra parte, son difíciles de hipertrofiar. Esto se debe a que están en continuo movimiento, razones que les hace muy sencillos de realzar pero bastante complicados de multiplicar su volumen. Aún así, veamos qué podemos hacer en esta marcha exprés.
Bíceps, músculos siempre en marcha
Notarás de forma normal que apenas unos pocos gestos sirven para ‘marcar’ el bíceps, situado en la parte anterior del brazo y dividido en dos partes (vasto interno y vasto externo). Algo tan nimio como cargar con las bolsas de la compra o ciertos ejercicios de elevación de manera consecutiva sirven para que tenga un aspecto más aparente.
Por contra, es un músculo que a pesar de tonificarse de manera habitual, supone complicaciones para multiplicar su desarrollo en cuanto a volumen. Además, son muchos los movimientos cotidianos que realizamos con ellos, motivo por el que trabajarlos no es tan costoso ni suele venir aparejado a la aparición de agujetas.
Pectorales: fáciles de trabajar, difíciles de desarrollar
Con los pectorales, tanto el mayor como el menor, nos pasa algo parecido que en el caso de los bíceps. Son fáciles de trabajar, pero alcanzar volumen es relativamente complicado, pues suele ser una parte bastante magra de nuestro cuerpo. Eso no significa que no podamos levantar su forma con unas cuantas sesiones.
No lograremos la hipertrofia, pero sí podemos generar una mayor tonificación con ejercicios muy sencillos. Si tenemos la suerte de tener un gimnasio a mano, el press de banca será nuestro mejor amigo. Si no lo tenemos, trabajar los pectorales en casa es sencillo. Tanto en prensas de pecho con mancuernas como en pequeñas series de flexiones nos servirán para levantarlos sin grandes complicaciones.
Trapecio, un músculo más funcional de lo que parece
Se trata de uno de los músculos más aparentes, pues su disposición en los hombros permite lucirle bastante a menudo, tanto vestidos como sin camisa. En cualquier caso, es un músculo de enorme funcionalidad, pues estabiliza el omóplato y juega un papel clave en el movimiento de los hombros.
Entre sus virtudes para trabajarlo con facilidad está el ser un músculo en perpetuo movimiento. Como en el caso de los dos anteriores aquí nos encontramos con una musculatura donde es difícil aumentar el volumen a corto plazo, pero sí podemos darle un impulso sencillo en unas pocas semanas. Una de las formas más sencillas de hacerlo es el denominado ‘farmers walk’ o paseo del granjero, que es tan fácil como coger peso en ambas manos y caminar de frente con ello, notando cómo tira el trapecio.
Glúteos, tan resultón como eficiente
Uno de los músculos más importantes de nuestro cuerpo es, a su vez, uno de los más fáciles de trabajar. Básicamente porque está todo el día en marcha, motivo por el que no es sencillo lograr una hipertrofia muscular en los glúteos, sobre todo si no hacemos ejercicios destinado a ellos. Sin embargo, conseguir cierta definición y realzar nuestros traseros no es tan complicado.
Como podéis imaginar, la mejor forma de empezar es recurrir a las sentadillas, que son baratas, accesibles y las podemos hacer a nuestro antojo y, en función de nuestro grado de dificultad, adaptarlas. Lastradas o sin lastrar, con respaldo —contra la pared— o sin él o, como es lógico, apoyándonos en silla o sin ella. A partir de que tengamos cogido cierto ritmo ya podemos modificarlas o aumentar la tensión del gesto, pero siempre con precaución.
Músculos imposibles de trabajar de manera exprés
Ya te hemos contado los cuatro músculos que, con un poquito de trabajo, podríamos trabajar en unas pocas semanas y obtener una cierta tonificación y apariencia de cara al verano. Otros, sin embargo, deben salirse de esta pretensión si queremos lucirlos en cuestión de un mes.
Olvidemos los abdominales, pues por su composición y tipo de fibras son muy difíciles de poner en marcha en pocos días. En un caso parecido le sucede a los músculos de los antebrazos y a los músculos de la parte posterior de la pierna, tanto a los isquiotibiales como a los gemelos y sóleos. Estos músculos están acostumbrados a una gran carga de trabajo, siempre en movimiento y exigen mucha actividad para lograr una hipertrofia y una tonificación acusada si tenemos poco tiempo.