El 'slip dress' vuelve a ser imprescindible (aunque el tiempo no acompañe demasiado)
Los vestidos lenceros vuelven a vivir una época dorada y su estética minimalista impera en los estilismos de fiesta
La tendencia boudoir, también llamada boudoircore, se encuentra en su máximo auge esta temporada. ¿Aún no sabes a qué se refiere? Es la moda que saca a relucir al exterior las prendas de lencería como tops, corsés o slip dress. Los encajes y transparencias inundan los diseños, dejando a la vista la ropa interior, y hasta hay quien se apunta al no pants, que se basa en no utilizar directamente pantalones o faldas.
Uno de los grandes beneficiados de esta oleada lencera es el slip dress. Los vestidos lenceros se han convertido en la nueva prenda imprescindible de los armarios rivalizando con el habitual LBD (little black dress). Es un tipo de vestido al que siempre se puede recurrir para un evento de noche porque nunca defrauda. Si celebrities de los 90, como Kate Moss, Gwyneth Paltrow o Jennifer Aniston, fueron abanderadas de estos estilismos, hoy te toca a ti coger el relevo.
La diferencia del actual slip dress con respecto a los de finales de siglo es que no oculta su pasado lencero, sino que lo potencia al máximo. De esta manera, se llena de encajes y recurre a tejidos satinados y transparencias sin ningún tipo de rubor. Y, aunque parezca más propio de la temporada estival, en THE OBJECTIVE te vamos a dar una buena clase de layering para que sepas adaptarlo a las bajas temperaturas combinándolo con otras prendas con tejidos mucho más cálidos como el punto o el furry.
Los vestidos lenceros favoritos
Dentro de los slip dress nos vamos a encontrar con una amplia variedad entre los que elegir. Una de las decisiones fundamentales será elegir el color. Nosotros tenemos dos favoritos. Por un lado el negro, que será perfecto para crear estilismos de aspecto gótico que tanto se llevan esta temporada. Si quieres darle un aspecto más oscuro, es mejor que los combines con camisas o camisetas debajo.
Nuestro otro color favorito es el rosa. El Barbiecore sigue marcando tendencia y ha sido, sin duda, el tono de moda de este año. Podemos elegir ese rosa chicle, pero otra de las tonalidades que mejor encajan con la lencería serán los tonos maquillaje. Y, si estás pensando en boda, elige un diseño blanco y largo. Serás una novia sencilla y atemporal y, por mucho que pasen los años, jamás te arrepentirás de tu look.
En cuanto a tejidos, aboga por aquellos clásicos de la lencería como el satén o el raso. Resultan muy fluidos y ultra femeninos. Elige escotes en pico y tirantes muy finos y sitúa adornos de encaje en la zona del pecho, la cintura o el bajo. Este guiño a las transparencias funciona de maravilla en cualquier slip dress.
Estos modelos de vestidos suelen ser bastante generosos mostrando piel pero, aún así, tenemos que tener en cuenta algunas características que suman puntos. Una de ellas pueden ser los diseños que cuentan con aberturas en las faldas. Incluye este tipo de rajas en los vestidos que se ajusten bien al pecho y realcen el busto.
Otra fórmula de reducir tejido son las espaldas descubiertas. Te será fácil encontrar propuestas en las que los tirantes descienden cruzándose a lo largo de toda la parte trasera.
Cómo llevarlos en invierno
El mayor problema que tenemos al contar con el slip dress como tendencia en invierno es que las temperaturas no acompañan para lucirlo con total libertad. Con escotes generosos, espaldas descubiertas y finos tirantes spaguetti, los vestidos lenceros hacen imposible acompañarlos de prendas térmicas debajo. La solución la encontraremos con la superposición de capas y el uso de abrigos.
¿Cuál es la mejor pareja? No tenemos duda: los abrigos de peluche. Así lo hemos aprendido de Kate Moss desde hace casi tres décadas. La modelo siempre acompaña a su inseparable slip dress con un abrigo de pelo sintético para poder abrigarse de las bajas temperaturas. Este mix ya forma parte de la historia de la moda, así que las firmas solo han tenido que tirar de hemeroteca para inspirarse.
Fendi ha recurrido a los abrigos de pelo en las pasarelas, pero Zara, Mango y H&M ponen a disposición de cualquier mortal estos modelos a precios mucho más asequibles. Con ellos, ya no hay excusas para no utilizar un vestido lencero en las próximas fiestas que tengas en el calendario.
No pienses que la combinación deja poco a la imaginación porque este tipo de abrigos ofrecen muchísimas posibilidades. En primer lugar, deberás de elegir su largura, ya que existen modelos hasta la cintura o diseños hasta los pies. La recomendación para esta temporada es que cuanto más largos, mejor.
Después de que tengas decidido cuál va a ser el largo ideal, tocará seleccionar exactamente el tejido que más te gusta. Podemos abrazar el peluche, si nos gustan los abrigos más suaves. Otra opción es la lana bouclé, que es aquella que tiene un aspecto rizado y que recuerda al borreguito. También están los materiales de felpa o los clásicos visones que resultan más realistas.
Cómo combinar el slip dress
Aunque ya hemos comentado que nada mejor que un abrigo de pelo para completar tu estilismo con un vestido lencero, la verdad es que existen otras posibilidades. Si nos quedamos en las prendas de abrigo, los slip dress aceptan muchas otras piezas, como una biker, una cazadora denim o una chaqueta bomber. Una cazadora de cuero tipo perfecto puede ser el contrapunto perfecto a la feminidad del vestido.
Cuando el termómetro empiece a recuperar temperaturas más cálidas, podemos darle tregua a los abrigos y mudarnos a la sección de blazers. Lo ideal es contrastar con un modelo oversize y con hombros armados. Las americanas pueden ayudarnos a crear todo tipo de estilismos, desde el más casual al más sofisticado. Solo hay que saber elegir.
Otra opción será abrigarnos con prendas de punto. Los cárdigan aportarán al look un punto boho muy exquisito. Si te decantas por esta mezcla tan diferente de tejidos, lo mejor que puedes hacer es elegir una chaqueta de punto extra grande.
¿Qué sucede con los accesorios? Pues en este terreno seguimos apostando por el contraste. Este invierno, la tendencia nos invitaría a calzarnos unas botas muy altas. Nada como un par de mosqueteras para elevar tu slip dress. Para darle al vestido un aire más casual, puedes arriesgar también con unas desenfadadas sneakers. En este caso, las zapatillas de color blanco serán tu mejor elección.
Para cerrar el estilismo, buscaremos una joya que sea especial. ¿Recuerdas el collar de Carrie con su nombre en Sexo en Nueva York? No hay mejor homenaje a la década de los 90. Y no te olvides de la parte beauty. Si quieres que el vestido destaque, no le robes protagonismo con el make up o el peinado y busca la máxima sencillez. El pelo suelto o una coleta básica será más que suficiente.
La historia del slip dress
Si piensas que el término slip procede de sleep (dormir en inglés) por ser similares a los camisones, estás equivocada. Para ver el nacimiento de los slip dress tendremos que viajar hasta las años 30, cuando en Vogue se empezó a acuñar la silueta slip. Se trataba de un estilo más estrecho y recto que el visto hasta entonces. La estética de los años 20 había pasado de moda.
El slip dress tiene como impulsora a Madeleine Vionnet, que empezó a realizar vestidos utilizando el corte al bies. Cortaba sus patrones en diagonal y usaba drapeados ,con lo que conseguía que el tejido se adaptara al cuerpo de la mujer, y no al contrario. Realizados en seda, y con un corte tan preciso y favorecedor, este tipo de vestidos no necesitan adornos, colores o estampados.
Nos encontramos en la época dorada de Hollywood y su actrices elevaron los slip dress a tendencia internacional con Jean Harlow como la mayor responsable de que todas las mujeres desearan tener un vestido lencero blanco en sus armarios.
El siguiente salto en el tiempo lo volvemos a tener en la década de los 90, cuando este tipo de modelos vuelven a vivir una etapa frenética gracias a la estética minimalista que imperaba en esos años con diseñadores como Donna Karan o Calvin Klein. Además, otras tendencias fueron culpables de esta resurrección, como la moda de empezar a enseñar la ropa interior o rescatar el estilo de figuras del Hollywood clásico como Greta Garbo.
A partir de 2020, los slip dress regresaron a nuestra vida con el auge por recuperar la moda de final de siglo. Defendidos por nuevos iconos de las redes sociales, como Hailey Bieber, y llevados a las masas por firmas como Zara, hoy vuelven a resultar igual de imprescindibles.