¿Qué pasa si abusas del azúcar? Estas son sus consecuencias
El exceso de azúcar puede llegar a ser peligroso ya que está vinculado con diversas enfermedades
Durante décadas, los expertos en salud han estado preocupados por el exceso de azúcar en la dieta. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se espera un alarmante aumento de la obesidad y la diabetes debido a este problema en los próximos años.
Lo preocupante es que el consumo de azúcar parece ser difícil de controlar. No solo se encuentra en alimentos donde puede ser agregado opcionalmente, sino que también se añade en grandes cantidades a alimentos comunes en la dieta diaria.
Por tanto, se están llevando a cabo múltiples esfuerzos para concienciar a los consumidores sobre los riesgos del exceso de azúcar y alentarlos a evitarlo o reducirlo significativamente.
Consecuencias del abuso del azúcar
Este ingrediente omnipresente en nuestra dieta moderna, ha sido objeto de un creciente escrutinio debido a sus posibles efectos negativos para la salud cuando se consume en exceso.
Desde bebidas endulzadas hasta alimentos procesados, el azúcar se ha infiltrado en muchos aspectos de nuestra alimentación diaria, y su consumo excesivo ha sido asociado con una serie de consecuencias adversas para la salud.
Sobrepeso y obesidad
Varios estudios han demostrado que las comidas altas en azúcar contienen demasiadas calorías y pueden contribuir al sobrepeso y la obesidad.
Estos azúcares, generalmente refinados industrialmente, cuando se consumen en exceso, no se convierten en energía, sino que se almacenan como grasa en el cuerpo.
Los expertos en salud y nutrición sugieren que una de las primeras acciones para perder peso es reducir o eliminar los alimentos con alto contenido de azúcar.
Diabetes
El azúcar hace que el cuerpo necesite más insulina, una hormona clave en el proceso de convertir los alimentos en energía.
Cuando los niveles de azúcar aumentan, el cuerpo puede volverse resistente a la insulina, lo que resulta en una acumulación de glucosa en la sangre. Este desequilibrio en los niveles de azúcar en la sangre puede conducir al desarrollo de la diabetes tipo 2.
Ansiedad por la comida
Este compuesto no solo es adictivo, sino que también puede causar antojos incontrolables de comida. Diversas investigaciones han revelado que su consumo afecta la leptina, una hormona que regula el apetito y la sensación de saciedad.
Hígado graso
El hígado se ve afectado porque es el único órgano que metaboliza la fructosa. Cuando se consume demasiada fructosa, el hígado trabaja más duro, lo que puede llevar a un deterioro más rápido. Esto puede provocar hígado graso, incluso en personas que no beben alcohol en exceso.
Enfermedades cardíacas
Según una investigación liderada por Diana I. Jalal de la Universidad de Colorado (EE. UU.), consumir 74 gramos de azúcar al día puede aumentar el riesgo de hipertensión arterial. Las dietas con alto contenido de azúcares se han asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas.
El consumo de azúcar eleva los niveles de triglicéridos, que son una forma de grasa que almacena las calorías adicionales del azúcar, y esto puede afectar negativamente el colesterol bueno.
Insuficiencia renal crónica
La insuficiencia renal crónica se define por la pérdida gradual e irreversible de las funciones de los riñones. Aunque aún se considera una hipótesis, un estudio liderado por David A. Shoham de la Universidad Loyola Chicago (EE. UU.) encontró que los refrescos con alto contenido de azúcar podrían ser una causa de albuminuria, un marcador de daño renal.
Deterioro dental
Carole Palmer, profesora de la Escuela de Medicina Dental de la Universidad Tufts (EE. UU.), explicó al periódico The New York Times que muchas bacterias presentes en la boca se alimentan de azúcares, lo que puede causar graves daños al esmalte dental. Además, advirtió que este hábito es una de las principales causas de infecciones bucales.
Cálculos renales
Las bebidas con azúcar y el azúcar refinada pueden aumentar el riesgo de cálculos renales hasta en un 25%, mientras que los refrescos no cola pueden incrementar las probabilidades hasta un 33%.
Para evitar esto, es recomendable reemplazar estas bebidas por opciones más saludables como agua, jugos naturales o infusiones.
Debido a su proceso de fabricación, los efectos negativos que puede tener en el cuerpo con su consumo continuo, y la adicción que puede generar, el azúcar está siendo comparado con varias drogas.