Fascitis plantar: que es, síntomas, causas y cómo tratarla
Quienes sufren de esto experimentan dolor en diferentes partes de la fascia plantar, pero es más común en el talón
La fascitis plantar es una de las razones principales detrás del dolor en el talón. Se caracteriza por la inflamación de la fascia plantar, un tejido grueso que recorre la planta del pie y conecta el hueso del talón con los dedos.
Los síntomas típicos de la fascitis plantar incluyen un dolor agudo que se siente principalmente al dar los primeros pasos por la mañana.
Este dolor tiende a disminuir con la actividad, pero puede volver después de períodos prolongados de estar de pie o al levantarse después de estar sentado por mucho tiempo.
¿Qué síntomas acarrea?
Quienes sufren de fascitis plantar pueden experimentar dolor en diferentes partes de la fascia plantar, pero es más común sentirlo en la zona donde esta se une con el hueso del talón.
Este dolor suele ser intenso al poner peso sobre el pie, especialmente al levantarse por la mañana. Aunque el dolor tiende a disminuir en unos minutos, puede regresar más tarde en el día.
El malestar suele empeorar al empujar el talón hacia fuera, como al caminar o correr, y después de periodos de reposo. En algunos casos, al caminar, se puede sentir un dolor punzante o ardiente a lo largo del borde interno de la planta del pie.
Causas
La fascia plantar es un tejido fibroso y resistente que se extiende desde el hueso del talón hasta la base de los dedos, proporcionando soporte estructural al arco del pie y ayudando a absorber el impacto al caminar o correr.
Cuando la fascia plantar se somete a tensión excesiva, puede experimentar pequeñas rupturas o desgarros microscópicos. Estos desgarros pueden ocurrir debido a actividades como correr, caminar largas distancias, estar de pie durante períodos prolongados o realizar movimientos bruscos que ejerzan presión sobre la fascia.
Estos estiramientos y desgarros constantes pueden causar irritación e inflamación en la fascia, lo que resulta en el desarrollo de la fascitis plantar.
Tratamiento
Según Cuidate Plus, la primera acción a tomar frente a la fascitis plantar es descansar el pie afectado. Luego, el tratamiento inicial generalmente incluye una combinación de antiinflamatorios y varias terapias de fisioterapia para reducir la inflamación de la fascia durante la fase aguda de la afección.
Es crucial visitar al podólogo tan pronto como aparezcan los primeros síntomas, ya que un tratamiento temprano mejora significativamente la recuperación de la lesión.
En la consulta, el especialista determinará el tratamiento más adecuado, que puede incluir vendajes funcionales, estiramientos, evaluación del calzado, plantillas ortopédicas a medida, fisioterapia, entre otros.
¿Cómo prevenir la fascitis plantar?
Para prevenir la fascitis plantar, es importante tomar medidas para reducir la tensión en la fascia plantar y minimizar los factores de riesgo. Aquí tienes algunas sugerencias que pueden ayudar, según el Manual MSD:
- Usar calzado adecuado: opta por zapatos que brinden un buen soporte para el arco del pie y una amortiguación adecuada. Evita los zapatos planos o desgastados que puedan aumentar la presión en la fascia plantar. También es recomendable alternar entre diferentes tipos de calzado para evitar sobrecargar continuamente la misma área del pie.
- Controlar el peso: mantener un peso saludable puede reducir la presión sobre los pies y el arco.
- Evitar actividades de alto impacto: si practicas deportes de alto impacto, asegúrate de usar calzado deportivo adecuado y realizar ejercicios de calentamiento y estiramiento antes y después de la actividad.
- Moderar el tiempo de estar de pie: si tu trabajo requiere estar de pie durante largos períodos, intenta tomar descansos regulares y descansar los pies siempre que sea posible.
Factores de riesgo
Aunque la fascitis plantar puede surgir sin una causa clara, varios factores pueden aumentar el riesgo de padecer esta condición. Estos incluyen:
- Edad: la fascitis plantar es más común en personas de entre 40 y 60 años.
- Actividades específicas: ejercicios que ejercen una gran presión sobre el talón y los tejidos conectivos, como correr largas distancias, ballet o danza aeróbica, pueden contribuir a la fascitis plantar.
- Mecánica del pie: condiciones como pies planos, arcos altos o un patrón de marcha anormal pueden afectar la distribución del peso en el pie, aumentando la tensión en la fascia plantar.
- Sobrepeso: el exceso de peso añade presión adicional a la fascia plantar.
- Trabajos que requieren estar de pie: profesiones que implican estar de pie durante largos períodos, como trabajadores de fábricas o maestros, pueden aumentar el riesgo de desarrollar fascitis plantar debido al estrés repetido en los pies.