Los dos alimentos antiinflamatorios para la piel, según Paula Martín Clares
Mantener una buena alimentación es esencial para el cuidado de la piel y la prevención de problemas cutáneos
Quizás sufrimos de granitos, poros dilatados, piel enrojecida o exceso de grasa. Esto puede deberse no solo a que necesitamos una mayor limpieza, sino también a la falta de alimentos antiinflamatorios en nuestra dieta.
La inflamación causa estrés oxidativo en las células, lo que lleva a signos de envejecimiento como manchas, arrugas, rojeces y deshidratación.
Sin embargo, hay alimentos con propiedades antiinflamatorias que, según una experta en nutrición, deben estar presentes en nuestra dieta.
¿Qué es la inflamación en la piel?
La inflamación en la piel es una respuesta del sistema inmunológico a una lesión, irritación o infección. Esta reacción puede manifestarse de varias formas, incluyendo enrojecimiento, hinchazón, calor, dolor y a veces pérdida de función en la zona afectada.
Se ha llegado a la conclusión que muchos problemas de la piel están relacionados con la alimentación. Y es que el ajetreo de la vida moderna que llevamos nos hace consumir de forma inconsciente más grasas, azúcares, cafeína y aditivos, lo cual no es beneficioso.
Por ello y según Paula Martín Clares, farmacéutica y nutricionista, se recomienda optar por alimentos antiinflamatorios.
Los alimentos antiinflamatorios que recomienda
La experta y autora del libro La salud de tu piel está en lo que comes, afirma que el pescado azul, especialmente el salmón, es un alimento antiinflamatorio por excelencia gracias a su alto contenido de ácidos grasos omega-3.
Además, frutas cítricas como el kiwi tienen un gran efecto antiinflamatorio y antioxidante, ayudando a reducir arrugas, deshidratación y manchas.
¿Cómo podemos desinflamar la piel?
La madre naturaleza siempre está a nuestra disposición para sanar todos nuestros males, incluyendo aquellos causados por una mala alimentación o comida procesada.
En lugar de usar pomadas, corticoides o cremas abrasivas para exfoliar la piel, una alternativa mucho más natural es incorporar alimentos antiinflamatorios en tu dieta.
Paula Martín Clares señala que consumir alimentos antioxidantes es crucial para mantener una piel sana y radiante, además de combatir el estrés oxidativo diario.
Entre estos alimentos se encuentran especias frescas, pescados azules, aceite de oliva, aguacate y frutos secos como las nueces, que son esenciales para reducir y combatir la inflamación de la piel.
- Salmón: contiene astaxantina, un potente antioxidante que puede neutralizar numerosos radicales libres y tiene propiedades antiinflamatorias, perfecto para pieles sensibles.
- Kiwi, naranjas y limones: estos cítricos son ricos en antioxidantes y tienen un efecto antiinflamatorio.
- Cúrcuma: esta especia dorada contiene curcumina, un compuesto con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes para la piel.
- Jengibre: ideal para reducir la inflamación y añadir sabor a las comidas, ayuda a eliminar toxinas, desinflamar la piel y actúa como antioxidante.
- Té verde: contiene catequinas, poderosos antioxidantes y antiinflamatorios.
- Aceite de oliva virgen extra: rico en antioxidantes y grasas saludables, es fundamental para una dieta equilibrada.
- Frutos rojos: arándanos, fresas y frambuesas son ricos en antocianinas, antioxidantes que combaten la inflamación.
- Ajo: además de sus propiedades antiinflamatorias, también es antimicrobiano.
- Espinacas: esta verdura de hoja verde está llena de compuestos que ayudan a reducir la inflamación y mejorar la salud en general.
- Nueces: son de los frutos secos más ricos en grasas saludables y antioxidantes.
La importancia de la higiene facial
Mantener una rutina diaria de limpieza es esencial para el cuidado de la piel y la prevención de problemas cutáneos como el acné.
La higiene facial regular elimina impurezas y células muertas, ayuda a prevenir el envejecimiento de la piel y la formación de arrugas, controla el acné y los puntos negros, y mejora la luminosidad y suavidad del rostro.
Además, una buena rutina de limpieza prepara la piel para absorber mejor los productos de cuidado, como hidratantes y tratamientos específicos, potenciando sus efectos beneficiosos.
Una buena limpieza de cara
Es importante realizar una limpieza facial dos veces al día. Por la mañana, ya que ayuda a eliminar el exceso de sebo y otras sustancias que se producen durante las horas de sueño, y por la noche, ya que elimina la contaminación, el sebo residual, el maquillaje y todas las impurezas acumuladas durante el día.
Para un cuidado efectivo de la piel, que garantice todos sus beneficios para la salud, se recomienda seguir una doble limpieza con dos pasos clave:
- Aplicar un producto a base de aceite o bálsamo limpiador en el rostro y cuello para eliminar el exceso de grasa, maquillaje, protector solar y partículas acumuladas durante el día.
- Utilizar un producto a base de agua, como un gel limpiador o espuma, para eliminar células muertas, impurezas y contaminación.
Es importante aplicar los productos con suavidad, sin frotar ni realizar movimientos agresivos. Esta delicadeza es especialmente crucial para las pieles propensas al acné, donde una limpieza agresiva puede empeorar la inflamación.