¿Si partimos las pastillas de Ibuprofeno tienen el mismo efecto?
Este fármaco es uno de los analgésicos y antiinflamatorios más comunes, y la forma en que se ingiere altera su efecto
Bote de pastillas de Ibuprofeno. | Europa Press
El ibuprofeno es uno de los analgésicos y antiinflamatorios más comunes, pero no todos saben que la forma en que se ingiere puede modificar y alterar su efectividad. Aunque partir una pastilla puede parecer un gesto inocuo e inocente, las consecuencias potenciales de hacerlo sin la debida recomendación de un médico, pone de relevancia la importancia de manejar los medicamentos con cuidado y bajo la supervisión de un profesional de la salud.
Partir las pastillas de ibuprofeno puede parecer la solución más sencilla para aquellos a los que los comprimidos les resultan de un tamaño demasiado grande para ingerirlos enteros. Sin embargo, es una práctica que conlleva riesgos importantes. Ya que partir una pastilla de Ibuprofeno no solo altera de la dosis que nos haya recetado nuestro médico, sino que también conlleva la irritación del estómago, efectos que pueden ser perjudiciales para la salud.
Por qué partimos el ibuprofeno
Muchos pacientes optan por partir las pastillas de ibuprofeno por diferentes razones: para ajustar la dosis, facilitar la ingesta oral o para alargar el suministro del medicamento. Sin embargo, esta práctica puede tener consecuencias no deseadas. Aunque a veces puede parecer una solución simple y práctica, partir una pastilla puede alterar su funcionamiento y reducir su efectividad.
Cubierta protectora en los comprimidos
Las pastillas de ibuprofeno, como muchos otros medicamentos, están recubiertas por una capa que no solo facilita la ingesta, sino que también protege al medicamento de factores externos como la humedad, la luz y el oxígeno. Esta cubierta asegura que el principio activo del medicamento llegue al organismo en la forma y dosis previstas. Al partir una pastilla, se rompe esta capa protectora, lo que puede llevar a una degradación del medicamento antes de que sea absorbido en el cuerpo, disminuyendo su efectividad.
Importancia de la dosis recomendada
Un aspecto crucial al partir pastillas es la precisión de la dosis. Las pastillas no están diseñadas para ser divididas de manera uniforme, a menos que estén marcadas con una ranura específicamente para ello. Esto significa que al partir una pastilla sin ranura, es probable que las mitades resultantes no contengan la misma cantidad de principio activo. En medicamentos donde la dosificación exacta es crucial, como en el caso de algunos tratamientos crónicos, partir los comprimidos conlleva no aportar a nuestro organismo la cantidad necesaria de los principios activos que necesitamos.
Incluso si la pastilla es divisible y presenta una ranura para ser cortada, puede que las dos mitades no sean iguales, ya que la distribución del principio activo dentro de la pastilla puede no ser homogénea. Con lo que las dosis pueden ser más fuerte o más débil de lo que se espera y en consecuencia los efectos secundarios también se multiplican.
Consecuencias de partir el Ibuprofeno
Algunas pastillas de ibuprofeno tienen un recubrimiento especial diseñado para liberar el medicamento de manera controlada a lo largo del tiempo (liberación prolongada) o para proteger el estómago al disolver el fármaco en el intestino (recubrimiento entérico). Partir estas pastillas altera su mecanismo de liberación, lo que puede resultar en una liberación demasiado rápida del medicamento, aumentando el riesgo de efectos secundarios o disminuyendo su eficacia.
Además, el recubrimiento entérico evita que el ibuprofeno cause irritación en el estómago, un efecto secundario común de este medicamento. Al partir una pastilla con este tipo de recubrimiento, se expone el medicamento a los ácidos gástricos antes de tiempo, lo que puede llevar a una mayor probabilidad de irritación estomacal o daño gastrointestinal.
Es seguro partir una pastilla
En algunos casos, partir una pastilla puede ser recomendable pero solo si el médico o farmacéutico lo aprueba. Los comprimidos ranurados están diseñados para ser divididos y pueden ofrecer una opción más segura para aquellos que necesitan ajustar su dosis. Sin embargo, incluso en estos casos, es importante utilizar un cortador de pastillas adecuado para garantizar un corte limpio y preciso.
Si no hay una ranura y se debe partir una pastilla por falta de suministro en la dosis necesaria, lo mejor es consultar a un profesional de la salud para explorar alternativas, como el uso de solución líquida del medicamento, que permite una dosificación más precisa y segura.
