Soy dermatóloga y esta es la solución para dejar de tener las uñas blandas

Tener uñas blandas y quebradizas puede ser frustrante y, en muchos casos, es un problema común que afecta tanto a hombres como a mujeres.

Las uñas blandas pueden deberse a varios factores, como deficiencias nutricionales, el uso excesivo de productos químicos o incluso hábitos poco saludables.

Sin embargo, existen soluciones que pueden ayudar a mejorar su fortaleza y apariencia, según expertos en dermatología y salud de las uñas.

¿Por qué se vuelven blandas las uñas?

El estado de las uñas puede reflejar el equilibrio general de nuestra salud. De acuerdo con la Dra. Cristina Eguren, dermatóloga especialista en uñas, una de las principales causas de las uñas blandas es la falta de ciertos nutrientes esenciales, como la biotina (vitamina B7), el zinc y las proteínas.

“La queratina, la proteína que compone nuestras uñas, necesita estos nutrientes para regenerarse y mantenerse fuerte”, explica Eguren.

Otros factores incluyen:

• Exposición a productos químicos: el uso frecuente de productos agresivos como quitaesmaltes con acetona, detergentes y productos de limpieza sin protección adecuada puede debilitar las uñas.
• Humedad prolongada: la exposición constante al agua, como cuando lavamos platos o hacemos tareas domésticas sin guantes, puede ablandar las uñas.
• Enfermedades subyacentes: algunas condiciones como el hipotiroidismo o problemas hepáticos pueden manifestarse con uñas frágiles o blandas.
• Envejecimiento: a medida que envejecemos, nuestras uñas tienden a volverse más frágiles y a perder su dureza natural.

Consejos para fortalecer las uñas blandas

Si bien es importante identificar la causa específica del debilitamiento, existen medidas que puedes adoptar para mejorar la salud y fuerza de tus uñas.

1. Incluir suplementos de biotina

La biotina, también conocida como vitamina B7, es clave para el fortalecimiento de las uñas. Y es que un estudio publicado en el Journal of Cosmetic Dermatology sugiere que tomar suplementos de biotina puede aumentar el grosor de las uñas y reducir su fragilidad en pocas semanas.

La dosis recomendada por los dermatólogos es de entre 2,5 mg y 5 mg diarios, siempre bajo la supervisión de un profesional.

2. Mantener una dieta equilibrada

La nutrición juega un papel fundamental en la salud de las uñas. Incorporar alimentos ricos en proteínas, hierro, zinc y omega-3 puede ayudar a fortalecerlas.

Según el nutricionista Carlos Ríos, «el pescado azul, los frutos secos y las espinacas son excelentes fuentes de estos nutrientes, que promueven la producción de queratina y mejoran la estructura de las uñas«.

3. Evitar el uso excesivo de productos agresivos

Reducir el uso de quitaesmaltes con acetona y otros productos químicos agresivos es esencial para proteger la queratina de las uñas.

Es recomendable optar por quitaesmaltes sin acetona y usar guantes al realizar tareas domésticas que impliquen contacto con agua o productos de limpieza.

4. Hidratar las uñas y cutículas

La Dra. Eguren también subraya la importancia de mantener las uñas y las cutículas bien hidratadas. Aplicar aceites ricos en vitamina E o cremas específicas para uñas puede ayudar a mantener su elasticidad y prevenir que se vuelvan quebradizas.

“El aceite de jojoba y el aceite de almendra son excelentes para masajear las uñas y las cutículas a diario”, añade la dermatóloga.

5. Limitar la exposición prolongada al agua

Estar en contacto con el agua durante largos periodos puede debilitar la estructura de las uñas, haciéndolas más blandas y propensas a romperse.

Los expertos recomiendan usar guantes de goma cuando se realicen tareas que impliquen mojar las manos repetidamente, como lavar platos o limpiar superficies.

6. Elegir esmaltes fortalecedores

Existen esmaltes diseñados específicamente para fortalecer las uñas, que contienen ingredientes como calcio y queratina. Estos productos forman una capa protectora que ayuda a prevenir el daño y refuerza la estructura de la uña.

Es importante leer las etiquetas y buscar aquellos libres de productos químicos como el formaldehído, que puede dañar la uña a largo plazo.

7. Evitar morderse las uñas

Morderse las uñas no solo las debilita, sino que también afecta la cutícula, lo que puede hacer que las uñas crezcan de forma irregular y con problemas.

Si esta es una costumbre difícil de romper, existen esmaltes con sabores amargos que pueden ayudar a evitar este hábito.

Si después de aplicar estos consejos sigues experimentando uñas blandas o quebradizas, es recomendable consultar a un dermatólogo.

«A veces, las uñas frágiles son un signo de una afección médica subyacente, como un desequilibrio hormonal o una carencia de nutrientes más grave», advierte la Dra. Eguren. Un examen médico puede ayudar a identificar la causa exacta y proporcionar un tratamiento adecuado.