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¿Se puede saber mi estado de salud según mis heces? Una experta en nutrición nos lo explica

Este proceso involucra una serie de órganos, desde la boca y el estómago hasta los intestinos, recto y ano

¿Se puede saber mi estado de salud según mis heces? Una experta  en nutrición nos lo explica

Una persona en el baño | Canva

El sistema digestivo es fundamental para el bienestar general de nuestro organismo. Es a través de él que asimilamos los nutrientes que necesitamos para sobrevivir y nos deshacemos de los residuos que nuestro cuerpo no puede utilizar.

Este proceso involucra una serie de órganos, desde la boca y el estómago hasta los intestinos, recto y ano, donde los restos de los alimentos ingeridos finalmente son expulsados.

Sin embargo, la mayoría de las personas no se detienen a considerar lo que sus heces pueden decir acerca de su salud digestiva.

En su libro El Secreto de la Buena Digestión, la experta en nutrición Ángela Quintas aborda este tema y nos proporciona herramientas para evaluar nuestra salud a través de nuestros excrementos.

El tabú de hablar de las heces

Aunque el tema de las heces es comúnmente abordado de manera natural entre los niños, a medida que envejecemos, el silencio sobre este asunto crece.

Para los más pequeños, es común que los padres se preocupen si sus excrementos son demasiado duros o blandos, pero rara vez los adultos prestan atención a los detalles de su propia digestión.

Sin embargo, la experta en nutrición Ángela Quintas señala que hablar de nuestras heces es fundamental para entender nuestro estado de salud y nuestro sistema digestivo.

Recientemente, Quintas explicó en una entrevista para la cadena de radio catalana RAC1 que «hablar de caca se convierte en lo más normal del mundo cuando tienes hijos», pero se convierte en un tema más tabú a medida que nos hacemos mayores.

¿Se puede saber mi estado de salud según mis heces?

Aun así, el estado de nuestras heces ofrece valiosa información sobre nuestra salud digestiva y general, desde el color y la forma hasta la consistencia de los excrementos.

La clave para evaluar tu salud digestiva

Una de las herramientas más conocidas para analizar las heces es la Escala de Bristol, que fue publicada por primera vez en 1997 en el Diario Escandinavo de Gastroenterología.

Esta tabla divide las heces en siete tipos, clasificados según su forma y consistencia. El objetivo es ayudar a identificar problemas digestivos y comprender mejor las posibles condiciones de salud.

Tipos de heces según la escala de bristol:

  1. Tipo 1: pequeñas bolitas duras y separadas, como nueces. Indica estreñimiento severo.
  2. Tipo 2: heces alargadas e irregulares, que pueden ser difíciles de expulsar. También puede ser signo de estreñimiento.
  3. Tipo 3: heces alargadas con grietas, algo más suaves, pero aún difíciles de expulsar.
  4. Tipo 4: heces alargadas, suaves, lisas y fáciles de expulsar. Este es el tipo más saludable y recomendado.
  5. Tipo 5: pequeñas bolitas blandas con bordes definidos. Indica heces de una consistencia más blanda.
  6. Tipo 6: heces blandas con bordes irregulares, similares a diarrea.
  7. Tipo 7: heces líquidas sin forma definida, indicando diarrea.

¿Qué significa cada tipo?

La experta en nutrición Ángela Quintas explica que, en general, las heces de tipo cuatro son las más saludables, ya que indican un sistema digestivo equilibrado.

Por otro lado, las heces tipo uno o dos podrían indicar que estamos enfrentando problemas de estreñimiento, mientras que las heces tipo cinco a siete podrían ser señales de intolerancia alimentaria o un trastorno digestivo.

¿Qué puede decir tu caca sobre tu salud?

Según Quintas, la apariencia de las heces puede ser un reflejo de varios problemas de salud. Aquí algunas de las claves que nos ofrece la experta:

  • Heces flotantes: si tus heces flotan, esto puede indicar un exceso de grasas o problemas relacionados con la serotonina. En este caso, es recomendable revisar tu dieta para verificar si estás consumiendo grasas en exceso o si tu sistema digestivo no está absorbiendo correctamente los nutrientes.
  • Heces agrietadas o rotas: si las heces son constantemente rotas o agrietadas, esto podría ser una señal de que tu cuerpo no está procesando correctamente los alimentos. Si este patrón persiste, sería importante consultar a un especialista.
  • Heces excesivamente blandas o líquidas: si necesitas mucho papel higiénico para limpiarte o las heces son excesivamente blandas, podría ser un signo de intolerancia a la lactosa o la fructosa. También podría indicar un desequilibrio en tu flora intestinal.
  • Frecuencia: la frecuencia saludable para defecar es de una o dos veces al día. El paso del alimento a través de tu sistema digestivo no debe tomar más de 38 horas, y las evacuaciones deben ser naturales, sin la necesidad de apuros o de esfuerzo excesivo.
  • Heces sin restos de comida o sangre: las heces no deben contener restos visibles de comida ni sangre. Si experimentas cualquiera de estos síntomas, es fundamental buscar la orientación de un profesional de la salud.

Consejos para mantener una salud digestiva óptima

Para tener una digestión saludable, la clave está en la alimentación equilibrada, el consumo adecuado de fibra, y una hidratación constante. Aquí algunos consejos prácticos de Quintas:

  • Evita los excesos de grasas y azúcares: los alimentos ricos en grasas y azúcares pueden afectar negativamente la digestión y la absorción de nutrientes.
  • Bebe suficiente agua: la hidratación es clave para mantener una buena consistencia de las heces.
  • Come alimentos ricos en fibra: la fibra facilita el tránsito intestinal y ayuda a evitar tanto el estreñimiento como la diarrea.
  • Escucha a tu cuerpo: presta atención a cualquier cambio en la frecuencia, forma o consistencia de tus heces, ya que pueden ser señales importantes de desequilibrios en tu sistema digestivo.
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