Cinco hábitos para detectar que sufrimos mal tránsito intestinal, según los gastroenterólogos
Pequeños cambios en nuestra rutina diaria pueden tener un impacto positivo en la digestión y bienestar
El estilo de vida, y especialmente la alimentación, juegan un papel crucial en la salud digestiva y el tránsito intestinal. En la actualidad, muchos padecen trastornos como el estreñimiento, la diarrea o irregularidades, lo que afecta su bienestar general.
¿Cómo afrontar estos problemas?
Para evitar estos problemas, varios gastroenterólogos han compartido con el medio francés Voici cinco hábitos esenciales que podemos incorporar a nuestra rutina diaria, especialmente a primera hora del día, para mejorar la salud de nuestro intestino.
1. Beber un vaso de agua al despertar
Uno de los primeros consejos más relevantes que suelen dar los expertos es comenzar el día con un buen vaso de agua. El gastroenterólogo Lance Uradomo, citado en Voici, destaca que «la molécula más abundante en las células que recubren el sistema digestivo es el agua«.
Esta afirmación subraya la importancia de mantenerse hidratado, ya que el agua es esencial para descomponer los alimentos, mejorar la digestión y facilitar la absorción de nutrientes.
Además, el agua ayuda a mantener el intestino en movimiento y evita la deshidratación, que puede contribuir a problemas como el estreñimiento.
2. Practicar actividad física, aunque sea moderada
La actividad física tiene un impacto directo en la salud intestinal. Los gastroenterólogos coinciden en que el ejercicio, incluso de baja intensidad como caminar, favorece el tránsito intestinal.
«El ejercicio aumenta el flujo sanguíneo a los músculos del sistema digestivo y ayuda a mover los alimentos a través del tracto digestivo», señala Uradomo.
El movimiento regular de los músculos digestivos es esencial para prevenir el estreñimiento y mejorar la digestión en general.
Incorporar actividades físicas diarias no solo beneficia el sistema digestivo, sino que también mejora la circulación y reduce el estrés, dos factores importantes para mantener un intestino saludable.
3. Optar por un desayuno rico en fibra y proteínas
El desayuno es la comida más importante del día, y no solo por cuestiones energéticas. Según la gastroenteróloga Lisa Ganjhu, de NYU Langone Health, un buen desayuno debe ser rico en fibra y proteínas.
«Me gusta imaginar que nuestro cuerpo es como un coche. Mejor empezar el día con el depósito lleno de gasolina», afirma Ganjhu.
Las fibras, especialmente aquellas con alto contenido de prebióticos, estimulan la microbiota intestinal, promoviendo un tránsito regular.
Las proteínas, por su parte, activan la actividad del intestino, ayudando a la digestión y al movimiento de los alimentos a través del tracto digestivo.
4. Incorporar especias antiinflamatorias
Las especias no solo son una excelente forma de añadir sabor a los alimentos, sino que también tienen propiedades que benefician la salud digestiva.
El gastroenterólogo Will Bulsiewicz sugiere agregar especias como la canela, el jengibre o la cúrcuma al café de la mañana. Estas especias tienen propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación intestinal y mejoran la digestión.
«La canela es un elemento fundamental. Tiene un dulzor natural y se puede combinar con otras especias», detalla Bulsiewicz.
5. Practicar meditación consciente para reducir el estrés
El estrés es uno de los principales enemigos del tránsito intestinal. Situaciones de estrés pueden desencadenar problemas como el estreñimiento o la diarrea, ya que afectan directamente la microbiota intestinal y la función digestiva.
El Dr. Victor Chedid, experto de la Clínica Mayo, enfatiza que la salud mental es un factor crucial en la salud intestinal. Para reducir el impacto negativo del estrés, recomienda incorporar prácticas de meditación consciente, que ayudan a calmar la mente y mejorar el bienestar general.
La meditación consciente puede equilibrar las funciones corporales, incluida la digestión, y disminuir la ansiedad, lo que a su vez favorece un tránsito intestinal más regular.