Cuidado con correr maratones: un estudio los ha relacionado con el cáncer de colon
Una nueva investigación ha relacionado correr largas distancias con el desarrollo del cáncer de colon

¿Los maratones podrían no ser tan buenos?
Los maratones y el running, en general, están cada vez más de moda. Y aunque hasta ahora estos deportes presentaban en su mayoría beneficios para la salud, en la actualidad están en entredicho por un nuevo estudio realizado por el Dr. Timothy Cannon, codirector del Programa de Cáncer Gastrointestinal del Instituto Oncológico Inova Schar. El doctor atendió a tres pacientes sorprendentemente similares. Todos eran relativamente jóvenes y corrían largas distancias con asiduidad. Él los definió como «atletas extremos». Y, curiosa y lamentablemente, todos tenían cáncer de colon en estadio IV. «Fue curioso que estos tres tuvieran en común el correr”, dijo a Health Cannon, quien comenzó a realizar una investigación al respecto para obtener más información.
Los resultados de ese estudio, presentados recientemente en una conferencia de la Sociedad Americana de Oncología Clínica, sugieren que podría existir una relación entre las carreras de larga distancia y las enfermedades. Al respecto, de los 100 corredores profesionales incluidos en el estudio, 15 presentaron un precursor del cáncer de colon, un hallazgo que sugiere que «correr distancias extremas, incluso maratones, es un riesgo», afirmó Cannon.
Un estudio relaciona correr con el cáncer de colon

El equipo de Cannon examinó a 100 corredores de entre 35 y 50 años. No eran corredores ocasionales, sino que todos habían hecho al menos dos grsndes maratones o cinco maratones normales.
Todos los participantes del estudio se sometieron a una colonoscopia, durante la cual los investigadores buscaron pólipos con alta probabilidad de convertirse en cáncer. En estudios previos con adultos de 40 años sin factores de riesgo específicos de cáncer de colon, este tipo de pólipo se presentó en aproximadamente el 5% de las personas examinadas. Y en el grupo de estudio de Cannon, el 15% de las personas los tenían. «Me sorprendió mucho que fueran tantos», dijo el autor del mismo.
Sin embargo, cabe resaltar que el estudio es pequeño y que no incluyó un grupo de comparación de no corredores. Asimismo, muchas investigaciones publicadas sugieren que la actividad física en realidad puede ayudar a prevenir el cáncer, así como otras enfermedades crónicas y problemas de salud.
Este nuevo estudio, no obstante, proporciona una evidencia que no se puede pasar por alto. No obstante, se necesita mucha más investigación para llegar a conclusiones firmes, especialmente en el caso de los atletas más ocasionales, es decir, la gran mayoría de los corredores.
¿Qué tiene que ver correr con el cáncer de colon?

Al margen del mencionado estudio, ¿cómo podría estar relacionado el hecho de correr con el cáncer de colon? «Durante una carrera larga y agotadora, el cuerpo desvía temporalmente el flujo sanguíneo del tracto gastrointestinal para que pueda sostener los músculos que impulsan la actividad», detallan los expertos de Health.
De esta manera, «los corredores extremos que pasan mucho tiempo en este estado podrían experimentar cambios fisiológicos que aumentan el riesgo de cáncer. También podría haber diferencias en el microbioma intestinal de los corredores frente a los de quienes no corren, entre otras posibilidades. Sin embargo, se necesita más investigación para determinar si realmente existe una conexión entre correr y el cáncer de colon y, de ser así, qué la provoca», aseguró el autor del estudio.
Aunque los hallazgos de la investigación pueden parecer alarmantes, Cannon afirmó que no quiere que nadie se desanime de hacer ejercicio, ni siquiera de correr largas distancias, debido a ellos, especialmente dada la necesidad de más investigación. No obstante, si «sueles correr muchos kilómetros, asegúrate de mantenerte al día con los controles de cáncer de colon y de hacerte un examen exhaustivo si experimentas síntomas inusuales, como sangre en las heces».