Un dermatólogo aclara por qué no debemos alarmarnos si se nos cae el pelo en la ducha
Reconocer a tiempo los cambios en el cabello y mantener hábitos saludables es la clave para conservarlo fuerte y cuidado

Caída de pelos | Canva pro
Ver pelos en el suelo de la ducha suele disparar las alarmas, especialmente en tiempos donde la estética capilar es un tema sensible. Sin embargo, el dermatólogo y profesor universitario Ramón Grimalt insiste en que la caída del cabello forma parte de un proceso de renovación natural y no es, por sí sola, un motivo para preocuparse. En una intervención reciente, Grimalt desmontó uno de los mitos más arraigados: «Cortarse el pelo no lo fortalece». Según su explicación, recortar solo hace que los pelos que se desprenden sean menos evidentes, lo que da la sensación de que se caen menos, mientras que en personas con el cabello largo esos cabellos sueltos se acumulan y se notan más, aunque la cantidad realmente sea la misma.
El experto recuerda que perder entre 80 y 100 cabellos al día es algo habitual. Pero su frase más llamativa fue: «Dentro de cuatro años no tendremos ni un solo cabello de los que tenemos hoy. Nos habrán caído y habrán vuelto a salir». Esa afirmación subraya la idea de que el cabello se renueva constantemente: los pelos que hoy vemos caer serán reemplazados por otros nuevos, en un ciclo biológico que mantiene el cuero cabelludo sano y activo. Grimalt señala que la verdadera señal de alerta no es la mera caída capilar, sino la miniaturización del folículo piloso, es decir, cuando el cabello nuevo que crece es cada vez más fino, débil y pierde volumen progresivamente, hasta volverse casi imperceptible. Es ahí donde hay que prestar atención, no cuando se ve algún pelo aislado en el peine.

El dermatólogo también advierte sobre los peinados excesivamente tensos, como coletas muy apretadas o trenzas duras, que pueden derivar en una alopecia por tracción, una forma de daño capilar localizado si se repite de forma habitual. Además, recuerda que en primavera y otoño es común que la caída del cabello se intensifique, lo que no necesariamente implica pérdida permanente: muchos de esos pelos vuelven a crecer meses después.
¿Cuándo es preocupante la caída de cabello?
El cirujano capilar Ignacio Sevilla señala que hay escenarios que sí requieren atención profesional: cuando la caída supera de forma persistente los 100 cabellos diarios, cuando aparecen zonas claras visibles o cuando se presentan síntomas como picor, dolor o sensibilidad en el cuero cabelludo. Sevilla distingue entre una caída capilar estacional, ligada al estrés, la nutrición o los cambios hormonales, y la alopecia androgénica, la forma más común y a menudo irreversible si no se trata a tiempo. Por eso, subraya la importancia de acudir al dermatólogo ante los primeros signos de pérdida capilar anómala.

Qué significa realmente ver pelos en la ducha
- La caída diaria, dentro del rango normal, forma parte del ciclo natural del cabello: crecimiento, reposo y renovación.
- El principal riesgo no es ver pelos sueltos, sino que los nuevos crezcan cada vez más finos, lo que indica miniaturización del folículo.
- Las personas con el cabello largo perciben más pérdida simplemente porque el pelo desprendido es más visible.
- Las variaciones estacionales suelen normalizarse con el tiempo.
- Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre una caída reversible y una alopecia crónica.
La visión de otros expertos sobre la caída del cabello
El dermatólogo Sergio Vañó, especialista en tricología y trasplante capilar, coincide en que la caída del pelo es un proceso natural, pero advierte que los hábitos de vida influyen de forma determinante. Factores como el estrés, la falta de sueño, el déficit de hierro o vitamina D, e incluso el exceso de cosméticos capilares pueden acelerar la caída. Por su parte, Rosa Taberner, dermatóloga y autora de referencia en tricología, insiste en que no existen soluciones milagrosas ni productos cosméticos capaces de frenar la alopecia. Los tratamientos eficaces deben ser siempre supervisados por un profesional y personalizados según el tipo de caída.
La caída capilar, aunque pueda resultar alarmante, no siempre es sinónimo de pérdida irreversible. El cabello, como recuerda Grimalt, vive en constante renovación. La clave está en aprender a diferenciar entre un proceso natural y una alteración del ciclo capilar. Detectar los primeros signos, cuidar la salud interna y evitar los falsos mitos sigue siendo el mejor punto de partida para mantener una melena sana.
