El doctor Pujol afirma que las tostadas no son la mejor opción: esta es la mejor alternativa
El desayuno sigue siendo el motor del día, y optar por opciones saludables marca la diferencia en la energía diaria
Desayuno | Canva
Cuando se trata del desayuno, muchas personas recurren a las clásicas tostadas como una opción rápida y cómoda para empezar el día.
Sin embargo, según el doctor Antelm Pujol, especialista en Endocrinología y Nutrición, esta elección podría no ser tan beneficiosa como parece.
En su lugar, propone una alternativa que no solo mejora la calidad nutricional, sino que también aporta importantes ventajas para la salud.
¿Cuál es la mejor opción para el desayuno?
Un estudio publicado en la revista científica Nutrients, compartido por el médico endocrinólogo Antelm Pujol en su perfil de X (anteriormente Twitter), aborda esta cuestión.
El ensayo clínico analizó a 50 personas sanas divididas en dos grupos, que durante cuatro semanas desayunaron una de estas opciones con un valor energético equivalente de 340 kilocalorías: avena cocida en agua o huevos cocidos.
El estudio encontró que el desayuno basado en huevos proporcionaba una mayor sensación de saciedad en comparación con la avena.
Esto se atribuye a una reducción significativa en los niveles de grelina, conocida como la hormona del hambre. En otras palabras, los participantes que desayunaron huevos experimentaron menos hambre y tuvieron un mejor control del apetito a lo largo del día.
Además, se desmitificó un temor común: consumir huevos en el desayuno no alteró los niveles de colesterol en sangre. Según el ensayo, ambos desayunos fueron seguros desde una perspectiva cardiovascular, sin cambios significativos en los niveles de colesterol LDL (malo) y HDL (bueno).
Esto refuerza la idea de que los huevos no representan un riesgo para la salud del corazón, como se ha pensado tradicionalmente.
Diferencias entre avena y huevos
Aunque los huevos mostraron ventajas claras en términos de saciedad y control del apetito, la avena sigue siendo una opción saludable.
Este cereal, rico en fibra soluble, proporciona beneficios digestivos y contribuye a mantener estables los niveles de azúcar en sangre.
Sin embargo, su perfil nutricional basado en carbohidratos parece ser menos efectivo para controlar el hambre prolongada en comparación con las proteínas y grasas de alta calidad presentes en los huevos.
El estudio también señaló que los desayunos influyen en cómo se siente una persona durante todo el día. Mientras que quienes desayunaron avena se sentían satisfechos inicialmente, esta sensación disminuía antes de las comidas posteriores.
Por el contrario, los que optaron por los huevos experimentaron una satisfacción que aumentaba progresivamente, especialmente en la cena.
Ventajas adicionales de cada opción
- Avena:
- Rica en fibra soluble, especialmente beta-glucanos, que ayudan a reducir el colesterol y a estabilizar el azúcar en sangre.
- Proporciona energía sostenida gracias a su contenido en carbohidratos complejos.
- Ideal para quienes buscan una opción vegetal, especialmente cuando se combina con frutas o frutos secos.
- Huevos:
- Fuente de proteínas completas y grasas saludables, esenciales para la regeneración muscular y el funcionamiento celular.
- Altamente versátiles en preparaciones y rápidos de cocinar.
- Contribuyen a una mayor sensación de saciedad, ayudando a controlar el peso a largo plazo.
¿Cuál elegir?
La elección entre avena y huevos depende de los objetivos y necesidades individuales. Ambas opciones son nutritivas y seguras para el corazón, pero si el control del apetito y la pérdida de peso son prioridades, los huevos ofrecen una ventaja adicional en términos de saciedad.
La avena, por su parte, sigue siendo una opción excelente para quienes buscan energía duradera y beneficios digestivos.
En última instancia, combinar ambos alimentos en diferentes momentos de la semana puede ser la estrategia más inteligente para disfrutar de lo mejor de ambos mundos.
Por ejemplo, avena con frutas y frutos secos en días de mayor actividad física, y huevos acompañados de verduras o aguacate para jornadas más tranquilas o enfocadas en el control de peso.
El desayuno sigue siendo el motor del día, y optar por opciones saludables como la avena o los huevos marca la diferencia en el bienestar y la energía diaria.
