Acelgas: propiedades y recetas saludables para aprovechar este superalimento olvidado
Incorporarlas en tu dieta diaria no solo ayuda a mantener un peso saludable, sino que también ayuda a tener una digestión óptima

Acelgas | Canva
Las acelgas, una verdura de hoja verde que ha sido parte de la dieta mediterránea durante siglos, han quedado en segundo plano frente a otros vegetales más populares. Sin embargo, este humilde ingrediente es un verdadero tesoro nutricional que merece un lugar destacado en nuestra alimentación diaria.
Propiedades y beneficios de las acelgas
Las acelgas son uno de esos superalimentos que, a pesar de estar llenos de nutrientes, a menudo pasan desapercibidos en nuestras cocinas. Su sabor suave y su textura versátil las convierten en un ingrediente ideal para todo tipo de platos: desde ensaladas frescas hasta sopas calientes o salteados rápidos. Además, incorporarlas a la dieta diaria aporta múltiples beneficios para la salud, desde mejorar la digestión hasta reforzar el sistema inmunológico.
1. Bajas en calorías
Con menos de 20 kcal por cada 100 gramos, las acelgas son perfectas para quienes buscan mantener su peso o iniciar un plan de adelgazamiento sin sacrificar nutrientes esenciales. Su bajo contenido calórico permite disfrutarlas en grandes cantidades sin afectar el balance energético diario, convirtiéndolas en un aliado para comidas abundantes y satisfactorias que no sobrecargan el organismo.

2. Ricas en vitaminas y minerales
Las acelgas destacan por su alto contenido de vitaminas y minerales que favorecen distintas funciones del cuerpo. La vitamina A es esencial para la salud ocular y el mantenimiento de la piel, mientras que la vitamina C fortalece el sistema inmunológico y ayuda en la absorción del hierro. La vitamina E actúa como antioxidante, protegiendo las células del daño oxidativo, y la vitamina K es clave para la coagulación sanguínea y la salud ósea. Además, minerales como hierro, magnesio, potasio y calcio ayudan a mantener la energía, regular la presión arterial y fortalecer huesos y músculos, convirtiendo a las acelgas en un alimento completo y nutritivo.
3. Alto contenido de fibra
La fibra presente en las acelgas desempeña un papel fundamental en la salud digestiva. Facilita el tránsito intestinal, previene el estreñimiento y contribuye a mantener un intestino saludable. Además, una dieta rica en fibra está asociada con la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas, haciendo de las acelgas un ingrediente que no solo alimenta, sino que protege.
4. Propiedades antioxidantes
Las acelgas contienen flavonoides, carotenoides y otros compuestos antioxidantes que ayudan a neutralizar los radicales libres responsables del envejecimiento celular y del estrés oxidativo. Su consumo regular puede colaborar en la prevención de enfermedades crónicas como la hipertensión, la diabetes tipo 2 o ciertos tipos de cáncer, convirtiéndolas en un verdadero escudo natural para la salud.
5. Efecto saciante
Gracias a su alto contenido en agua y fibra, las acelgas generan una sensación de saciedad duradera. Esto las hace ideales para controlar el apetito entre comidas y reducir la ingesta calórica de manera natural, favoreciendo la pérdida de peso o el mantenimiento de un peso saludable. Además, su textura y volumen aportan satisfacción al comer, ayudando a que las comidas sean más completas y equilibradas sin necesidad de recurrir a alimentos ultraprocesados.
Recetas con acelgas fáciles para cualquier día
Incorporar más verduras a tu día a día no tiene por qué ser complicado. Estas recetas con acelgas son fáciles, deliciosas y perfectas para mantener una alimentación sana y equilibrada cualquier día de la semana.
1. Tortilla de acelgas y queso fresco: bate 2 huevos, añade 200 g de acelgas cocidas y 50 g de queso fresco desmenuzado. Salpimenta al gusto. Cocina en una sartén antiadherente hasta que cuaje por ambos lados. Listo para desayunar o cenar.
2. Acelgas salteadas con ajo y cebolla: corta 300 g de acelgas, 1 cebolla y 2 dientes de ajo. Saltea el ajo y la cebolla en 1 cucharada de aceite de oliva hasta dorar, añade las acelgas y cocina unos minutos. Salpimenta y sirve como acompañamiento.
3. Sopa de acelgas con zanahoria: corta 200 g de acelgas y 1 zanahoria. Hierve 1 litro de caldo de verduras con la zanahoria 10 minutos, añade las acelgas y cocina otros 10 minutos. Tritura todo, ajusta sal y pimienta, y disfruta caliente.
4. Ensalada de acelgas con tomate y aguacate: mezcla 150 g de acelgas, 1 tomate picado y ½ aguacate en rodajas. Aliña con jugo de 1 limón, 1 cucharada de aceite de oliva, sal y pimienta. Remueve y sirve fresca.