Los forenses descartan en el Chicle una "alteración psiquiátrica" que influya en su comportamiento
El Chicle, único procesado por el crimen de Diana Quer, padece un trastorno obsesivo compulsivo, intolerancia, falta de empatía y tendencia a la atribución externa de responsabilidades, según los psicólogos
Forenses del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), dos médicos y dos psicólogas, han declarado este martes que José Enrique Abuín Gey, el Chicle, el único procesado por el crimen de Diana Quer, no padece alteración psiquiátrica alguna que influya en su comportamiento y no aprecian sufrimiento psíquico en él.
«Él mismo lo dijo, que estaba bien», ha señalado una de las expertas en la sexta sesión de la vista oral en la cual ha explicado que el crimen no produjo en él un estrés postraumático y que tiene facultades cognitivas y volitivas plenas, por lo tanto no está alterada su capacidad para comprender.
Las psicólogas no han realizado un perfil sobre el acusado y sí un informe sobre su imputabilidad, que data de 2018, en el que se concluye que el Chicle era responsable de sus acciones. Han determinado también que presenta resentimiento, que responde con rencor, pero que en cambio es capaz de controlar su ira, de guardar y «diferir de cara al futuro», de no actuar compulsivamente y sí de tener una conducta tardía.
De hecho, las psicólogas han puesto como ejemplo que él mismo llegó a decirles que en una ocasión esperó un año para romperle los dedos a alguien que se había metido con su pareja.
Además, han detectado en él un trastorno obsesivo compulsivo, así como susceptibilidad («fácilmente se siente ofendido»), intolerancia, falta de empatía y, asimismo tendencia a la atribución externa de responsabilidades.
Han contado que él llegó a declarar: «he tenido una situación horrible que hacen que me sienta culpable», pero en cambio no han visto estrés postraumático ni «sufrimiento emocional» en el Chicle tras la muerte de Diana en agosto de 2016.