Microsoft invierte 1.000 millones de dólares en la inteligencia artificial de Elon Musk
La cooperación entre ambas compañías permitirá que Microsoft mejore la tecnología de su nube y que OpenAi tenga más recursos para desarrollar sus investigaciones
Microsoft ha anunciado este lunes un acuerdo con OpenAI, un proyecto de inteligencia artificial cofundado por Elon Musk en el que invertirá mil millones de dólares –890 millones de euros– en una iniciativa destinada a ampliar los beneficios económicos de la inteligencia artificial en todo el mundo.
Ambas empresas han dado a conocer la operación, que entre otras cosas implicará que Azure –el servicio de nube de Microsoft– pase a ser el único proveedor de servicios de este tipo de OpenAI y, a su vez, que OpenAI contribuya a desarrollar nuevas tecnologías de supercomputación para Azure.
¿Cuál es el origen de OpenAI? Fue cofundada por Musk –padre de Tesla, PayPal y SpaceX, entre otras empresas– en 2015 en San Francisco como una organización sin ánimo de lucro que nació con el objetivo de investigar en el campo de la inteligencia artificial para promover el desarrollo de tecnologías que «beneficien a la humanidad en su conjunto».
«La inteligencia artificial es una de las tecnologías más transformadoras de nuestro tiempo y tiene el potencial de ayudar a solucionar muchos de los retos más urgentes de nuestro planeta«, ha indicado el consejero delegado de Microsoft, Satya Nadella. «Al juntar la tecnología puntera de OpenAI con las nuevas tecnologías de supercomputación en inteligencia artificial de Azure, nuestra ambición es democratizar la inteligencia artificial para que todo el mundo se pueda beneficiar de ella, manteniendo siempre la seguridad en primer plano».
Por su parte, el consejero delegado de OpenAI, Sam Altman, ha asegurado que la creación de inteligencia general artificial será «el desarrollo tecnológico más importante de la historia de la humanidad» y se congratuló de que Microsoft «comparta» su visión de una inteligencia artificial cuyos beneficios recaen en todo el mundo.
La semana pasada, la empresa creadora del sistema operativo Windows que cofundaron hace 44 años Bill Gates y Paul Allen anunció unos beneficios netos de 39.240 millones de dólares –35.000 millones de euros– en el conjunto de su año fiscal 2019, lo que supuso más del doble de las ganancias obtenidas en el ejercicio anterior, cuando estas se quedaron en los 16.571 millones –14.800 millones de euros–.
El servicio en nube, apuesta estratégica de la compañía de Redmond –en el estado de Washington– de cara al futuro, sigue siendo unos de los principales impulsores del crecimiento en la firma, y los ingresos de la plataforma Azure (que compite con las nubes de Amazon y Google) se incrementaron un 73%.