Macri anuncia una reducción de ministerios y nuevos impuestos ante la crisis en Argentina
El presidente argentino, Mauricio Macri, ha anunciado este lunes que se tomarán nuevas medidas de austeridad como la reducción de ministerios y nuevos impuestos para Argentina, ya que actualmente se enfrenta a una crisis financiera, por lo que está renegociando con el Fondo Monetario Internacional un programa de ayuda de 50.000 millones de dólares.
El presidente argentino, Mauricio Macri, ha dicho este lunes que se tomarán nuevas medidas de austeridad como la reducción de ministerios y nuevos impuestos para Argentina, ya que actualmente se enfrenta a una crisis financiera, por lo que está renegociando con el Fondo Monetario Internacional un programa de ayuda de 50.000 millones de dólares. Después de estos anuncios, la moneda argentina volvió a sufrir un ataque de los mercados, al cerrar el tipo de cambio en 39,04 pesos por dólar con pérdida de 2,74%.
Entre las nuevas medidas habrá una reducción de la cantidad de ministerios a menos de la mitad y nuevos impuestos a las exportaciones. «Tenemos que hacer todos los esfuerzos por equilibrar las cuentas del Estado», ha declarado el mandatario en una alocución a la nación en la que pidió a los argentinos unidad para enfrentarse a las dificultades.
Poco después, en una rueda de prensa, el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, ha explicado que se deja atrás la meta de déficit fiscal de 1,3% para 2019 –el objetivo fiscal en 2018 es del 2,7% del PIB– para comprometerse con el equilibrio a partir de ese año: «En 2019 queremos llegar al equilibrio fiscal primario. Bajando el déficit bajamos nuestra necesidad de emitir deuda». El ministro ha calculado el ahorro fiscal del próximo año en unos 6.000 millones de dólares.
Dujovne debe viajar a Washington esta noche para renegociar el martes el paquete de ayuda del FMI y exponer a la directora de la organización, Christine Lagarde, los detalles del nuevo compromiso que Argentina asume a cambio de acelerar los desembolsos que estaban previstos para 2019 y 2020. Desde junio ya ha recibido 15.000 millones de dólares y la semana pasada percibió otros 3.000 millones.
El Gobierno apunta al desfavorable entorno internacional como una de las causas de la crisis, en particular la situación en Turquía y en Brasil, así como la guerra comercial entre Estados Unidos y China; no obstante, Macri también reconoce «errores propios» en relación a las medidas adoptadas para enfrentar el nuevo escenario.
Queridos argentinos, les hablo desde el corazón, con la verdad, como siempre lo hice y con la convicción de que si seguimos adelante vamos llegar a esa Argentina que soñamos hace mucho, mucho tiempo.
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 3 de septiembre de 2018
Más impuestos, menos ministerios
Entre las nuevas medidas anunciadas, habrá una reducción de la cantidad de ministerios –actualmente 22–, a menos de la mitad para poder dar «una respuesta más focalizada a la agenda que viene», así como nuevos impuestos a las exportaciones. Esas medidas «aceleran la austeridad, pero se quedan cortas en cuanto a las expectativas generadas», ha estimado un análisis de Capital Economics.
«Vamos a pedir a quienes tienen más capacidad para contribuir, a los que exportan, que su aporte sea mayor«, ha señalado Macri. Dujovne ha explicado que el nuevo impuesto por el que cada dólar exportado se tributará un adicional de entre tres y cuatro pesos será transitorio. Los exportadores pagarán una retención extra de hasta 10% por cada dólar que reciban.
Esto significará una recaudación adicional de 68.000 millones de pesos –alrededor de 1,7 millones de dólares– en 2018 y unos 180.000 millones –en torno a 4.700 millones de dólares– el año próximo, según ha indicado Dujovne.
«Creemos que es crucial que el riesgo del país vuelva a bajar», ha insistido el ministro, al considerar que el esfuerzo «está balanceado» entre el ajuste del Estado y el aumento de impuestos a la exportación.
Para empezar a construir el país que queremos, tenemos que equilibrar nuestras cuentas. Cualquier estrategia de desarrollo necesita empezar por ahí, con un Estado que gaste menos de lo que ingresa.
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 3 de septiembre de 2018
Desde abril, Argentina intenta evitar una crisis que disparó la depreciación de la moneda con un acumulado de 50% en el año. Este lunes, el peso se cotizó en 38,32 por dólar, lo que representa una caída de 0,89% con respecto al viernes. En las últimas semanas, también se ha disparado la proyección de inflación a más de un 30% en 2018 y se prevé una caída del PIB de al menos un 1%.
«Sabemos que con esta devaluación la pobreza va a aumentar», ha admitido Macri, quien prometió mantener y mejorar programas de auxilio social para un país en el que la pobreza afecta a un tercio de la población de 40 millones de personas.
Desde que asumió el cargo en diciembre de 2015, el gobierno de centro derecha de Macri ha impulsado un drástico recorte de gastos del Estado a través de la eliminación de subsidios, despidos y congelación de contrataciones en la administración pública, entre otras medidas de ajuste fiscal. En contrapartida, las medidas del presidente han beneficiado con una rebaja impositiva a las millonarias exportaciones agrícolas. «Esta crisis no es una más, tiene que ser la última. Tenemos todo para salir adelante», ha enfatizado Macri.