Estas son las pegatinas obligatorias que deberás llevar en el coche según la DGT
Los coches personalizados con adhesivos de diferente tipo son muy comunes, aunque depende de cómo sean y dónde estén puestos pueden acarrear una multa al conductor
Las pegatinas no pueden ir en cualquier parte del coche | Unsplash
Es común ver coches con pegatinas en la carrocería cuyo único propósito es adornarlo. Sin embargo, no todas esas pegatinas son legales e, incluso, algunas pueden suponer una multa. En el lado opuesto, sí que hay otras que, según advierte la DGT, hay que llevar sí o sí en el vehículo.
Para empezar, una pegatina que es completamente obligatoria es la de la ITV. Esta sirve para indicar que el vehículo cumple los requisitos y ha superado la Inspección Técnica de Vehículos. Además, hay que llevarla en un lugar visible y pegada correctamente; de lo contrario, el conductor puede recibir una multa de 80 euros. ¿Y cuál es la forma correcta de pegarla?
Desde la DGT explican que hay que colocarla en la parte superior derecha del interior del parabrisas, para permitir a los guardias de tráfico verla sin problemas. No hay que llevar todas las pegatinas, solo la más reciente. Al recibir la nueva pegatina hay que quitar la anterior y sustituirla. En caso de tener que cambiar la luna, habrá que pedir una nueva pegatina.
Otra de las pegatinas obligatorias, aunque no en todas las ciudades, es la del distintivo ambiental. El objetivo de esta es saber los niveles de contaminación de cada vehículo. De esta forma podrán o no circular en determinadas zonas donde está limitada la circulación, así como durante episodios de contaminación elevada. La forma de esta pegatina es redonda y va colocada en la esquina inferior derecha.
Por último, también existen unas de identificación nacional. Estas pueden llevarlas aquellos vehículos matriculados antes de 1998 y que, por tanto, no tienen el distintivo europeo en la matrícula (la banda azul de la Unión Europea y la E de España). Está permitido colocar la pegatina con la eurobanda correspondiente del país junto a la placa, pero nuca sobre ella.
Además de estas pegatinas también hay otras que, aunque no son obligatorias, sirven para transmitir información al resto de conductores. Un ejemplo sería el caso de las de «bebé a bordo». A diferencia de lo que ocurre con las obligatorias, que sí que tienen establecido el sitio en el que tienen que ir, con las que no lo son no existe ningún reglamento específico.
Esto implica que la decisión de multar o no a un conductor por los adhesivos que lleve en el coche depende de la interpretación de los agentes de Tráfico. No obstante, sí que existe un requisito objetivo a la hora de decidir dónde colocar estas pegatinas.
Dónde poner las pegatinas no obligatorias
El Reglamento General de Circulación establece, en su artículo 19.1, que «la superficie acristalada del vehículo deberá permitir, en todo caso, la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circule, sin interferencias de láminas o adhesivos».
Es decir, no prohíbe expresamente el uso de las pegatinas pero sí especifica que no deben impedir la visibilidad del conductor. Si impiden la visión del exterior del automóvil el conductor podrá ser sancionado y, además, el vehículo no pasará la ITV.
Por tanto, está permitido poner estos adhesivos tanto en la chapa como en las lunas y las ventanillas del coche, pero no pueden dificultar la visibilidad a través de la superficie acristalada o los retrovisores. A pesar de esto, tampoco pueden ir repartidas por todo el coche y, de afectar a la visibilidad del conductor, la multa puede ser de hasta 200 euros.
Aquellas pegatinas que sí están prohibidas son las que tapan la matrícula del coche, pues esta debe ir siempre al descubierto. Además, llevarla sucia o en mal estado también será motivo de multa. También están prohibidas las pegatinas reflectantes o luminiscentes. Esto es porque pueden reflejar la luz, provocando reflejos y entorpeciendo la visibilidad al resto de conductores. Por último, tampoco están permitidas las pegatinas de competición, porque pueden incitar al aumento de velocidad.
