El legendario actor británico Sean Connery, conocido sobre todo por sus interpretaciones de James Bond, ha muerto a los 90 años, según ha informado este sábado su familia a la BBC.
Lo más importante: el actor escocés participó, a lo largo de su carrera, en siete películas de la popular saga de 007: Dr. No, Desde Rusia con amor, Goldfinger, Operación trueno, Solo se vive dos veces, Diamantes para la eternidad y Nunca digas nunca jamás. Entre su palmarés cinematográfico, se encuentra un premio Oscar, dos BAFTA y tres Globos de Oro.
Sean Connery dejó la escuela para unirse a la Marina a los 16 años. En los muelles de Portsmouth perfeccionó sus aficiones favoritas: fútbol, boxeo y mujeres. En esa época se hizo los dos tatuajes en el antebrazo derecho. Uno representba una ardilla y un pájaro con la inscripción «mamá y papá», y el segundo un corazón con un cuchillo clavado que decía «Escocia para siempre». Familia y Escocia, dos prioridades de su vida. De hecho, era nacionalista escocés y abogaba por su independencia con respecto al Reino Unido.
De vuelta a la vida civil tras tres años por culpa de una úlcera, encadena pequeños trabajos, a veces pintorescos. Fue profesor de natación, pulidor de ataúdes, repartidor de carbón, albañil, conductor o guardaespaldas. Se dedicó incluso al culturismo y se inscribió en el concurso de Mister Universo en Londres, en 1950, en el que quedó tercero.
Su físico imponente será su pasaporte a la gloria. A los 27 años comenzó su carrera de actor cuando, tras ser visto en un telefilm para la BBC, firmó un contrato con la 20th century Fox. Rápidamente, encadenó los rodajes cuando fue contactado para participar en la adaptación de una novela de espías. Se negó a someterse a una prueba para el papel, argumentando: «Me toman como soy o me dejan». La insolencia gustó y, por 6.000 libras, fue así como se convirtió en el agente secreto 007, James Bond.
El éxito del intérprete le llevó a participar en decenas de películas más allá de la popular franquicia antes de retirarse definitivamente del mundo de la actuación en 2006, solo interrumpida por un papel de voz en una película de animación y por la producción de un filme en el que no trabajó como actor. Entre los éxitos más destacados de su filmografía, más allá de las películas de James Bond, están títulos como Los intocables de Elliot Ness (por la que ganó un Oscar al mejor actor de reparto), El nombre de la rosa y Asesinato en el Orient Express.