Menos mal que nos queda Portugal

«La productividad no lo es todo —escribe el Nobel Paul Krugman—, pero en el largo plazo lo es casi todo. La capacidad de un país para mejorar su nivel de vida a lo largo del tiempo depende casi por entero de su capacidad para aumentar su producción por trabajador».

¿Y qué tal andamos en España de productividad?

Pues muy malamente. Apenas creció un 0,1% anual entre 2007 y 2020. La consecuencia es que la brecha existente entre la renta per cápita española y la de la eurozona, que se había ido estrechando entre 1995 y 2008, se ha reabierto y ahora mismo estamos igual que en 1995.

Hemos vuelto a la casilla de salida.

Mientras tanto, nuestros vecinos portugueses, que fueron rescatados en 2011, han reformado y puesto a punto su aparato productivo y en cualquier momento nos van a dar el sorpaso en renta per cápita, si es que no nos lo han dado ya.

¿Por qué se ha estancado la productividad española? ¿Está haciendo el Gobierno lo que debería para reactivarla? ¿Y por qué le va bien a Portugal, si es que le va bien? ¿Es un modelo a seguir?

El profesor del IESE Javier Díaz-Giménez y el corresponsal económico de EL LIBERAL / THE OBJECTIVE, Miguel Ors Villarejo, debaten sobre todo ello en esta nueva entrega de El gris importa.