Sánchez elogia a la Policía y exige a Torra que condene la violencia en Cataluña
El presidente del Gobierno en funciones ha enviado una carta al president de la Generalitat para recordarle su obligación de «condenar la violencia, evitar la discordia civil y amparar a las fuerzas de seguridad»
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se ha desplazado este lunes a Barcelona para visitar a los agentes heridos en los disturbios de estos días en Cataluña[contexto id=»381726″], y además ha enviado esta mañana una carta al president de la Generalitat, Quim Torra, para recordarle su obligación de condenar la violencia y «evitar la discordia civil».
Sánchez no ha dudado en elogiar a la Policía Nacional como «ejemplo de profesionalidad y de vocación de servicio público», y ha hecho un llamamiento a «garantizar la moderación que representan» los cuerpos policiales para «asegurar la convivencia».
Así lo ha dicho en su discurso ante los mandos policiales en la Jefatura Superior de Policía de Cataluña, en la Via Laietana de Barcelona, acompañado del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y de la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera.
«No estáis solos, hay muchísima gente detrás vuestro», ha destacado Sánchez, que ha tenido «palabras de agradecimiento, de reconocimiento, de solidaridad, de apoyo y sobre todo de ánimo» para los agentes.
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Según el presidente en funciones, resulta «evidente que los radicales y los violentos han decidido que Barcelona sea el teatro de operaciones», para «trasladar fuera y al conjunto de la sociedad española su contestación» y convertirla en «algo mucho más extraordinario de lo que realmente es, que sin duda alguna lo es».
Sánchez ha advertido de que «la crisis no ha acabado», por lo que «tenemos que persistir», y ha añadido: «Ellos probablemente quieran persistir, cronificar esta crisis. Nosotros somos mucho más persistentes».
Tras su visita a la sede de la Jefatura, Sánchez ha salido del edificio, donde ha escuchado algunos abucheos y gritos de «Libertad presos políticos», antes de dirigirse a los hospitales donde se encuentran los agentes heridos en los disturbios ocurridos en los últimos días en las calles de Barcelona.
Sánchez exige a Torra que condene la violencia «de forma rotunda»
Asimismo, el presidente en funciones ha enviado esta misma mañana una carta a Torra en la que le recuerda las obligaciones de todo responsable público: «Condenar la violencia de forma rotunda; amparar a las fuerzas de seguridad que la combaten; y evitar la discordia civil».
La carta enviada a Torra es la respuesta a la que el sábado le remitió el president de la Generalitat a Sánchez, a quien reprochaba que no hubiera atendido sus llamadas telefónicas y se negara a establecer ningún tipo de diálogo, al tiempo que recriminaba al jefe del Gobierno en funciones que quisiera darle lecciones sobre cómo condenar o luchar contra la violencia.
«En respuesta a su carta del 19 de octubre y a los emplazamientos públicos que ha formulado en estos días, me permito recordarle que el primer deber de cualquier responsable público es velar por la seguridad de los ciudadanos, así como por la de cualquier espacio público o privado frente a las conductas violentas», responde Sánchez a Torra.
Le recuerda también que el «segundo deber» de un responsable público «es preservar la convivencia entre todos los integrantes de la sociedad civil y evitar la fractura de su comunidad», y le reprocha que su conducta se haya «movido en los pasados días justamente en sentido contrario».
En este sentido, señala que el presidente catalán ha evitado condenar de modo «tajante e inequívoco» las conductas violentas que se han manifestado con virulencia y asiduidad en diversos puntos de Cataluña, «incluso a poca distancia de su despacho».
Según Sánchez, Torra «ha vuelto la espalda a las fuerzas y cuerpos de seguridad autonómicos y estatales» que protegen el orden público «con gran profesionalidad y exponiéndose a graves riesgos».
«Ha vuelto la espalda e ignorado a más de la mitad de la población catalana simplemente porque no comparte sus propósitos en vez de comportarse como el presidente de todos los catalanes», continúa en la carta el jefe del Gobierno en funciones.
«Condenar la violencia de forma rotunda; amparar a las fuerzas de seguridad que la combaten; y evitar la discordia civil» son las exigencias que Sánchez plantea a Torra, a quien recuerda que esas son «las tres obligaciones que debe cumplir un gobernante si quiere ostentar con dignidad la representación de su comunidad ante cualquier interlocutor».