El Gobierno de Donald Trump[contexto id=»381723″] ha pedido al Tribunal Supremo, en medio de la pandemia del coronavirus[contexto id=»460724″], que tumbe la ley sanitaria de Estados Unidos, más conocida como «Obamacare». Un portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, ha dicho en un comunicado que «una pandemia global no cambia lo que los estadounidenses saben: ‘Obamacare’ ha sido un fracaso ilegal».
En contexto: el Alto Tribunal, que en el pasado ha fallado dos veces en favor de «Obamacare», estudia ahora un caso impulsado por una veintena de estados en manos de republicanos que argumentan que, a raíz de unos cambios legislativos de 2017, la ley es inconstitucional. En diciembre de 2018, un juez federal de Texas les dio la razón declarando inconstitucional la reforma y abriendo un litigio legal que está ahora en manos del Supremo con estados en manos de los demócratas, que la defienden. Este juez y también un tribunal de apelaciones inmediatamente inferior al Supremo consideraron que, tras la aprobación de la reforma fiscal, con la que se eliminaron las multas a la obligación de tener un seguro médico, conocida como «mandato individual», «Obamacare» paso a ser inconstitucional.
El Ejecutivo presidido por Donald Trump ha renunciado a ejercer la defensa de la ley en este caso, en una decisión poco habitual, y ahora ha dado un pasó más alineándose con los impulsores de la demanda.
La pandemia ha provocado que millones de personas dependan de la cobertura pública de salud dada la masiva destrucción de trabajos que ha provocado en Estados Unidos, país en el que las pólizas están asociadas a las empresas. Además, Estados Unidos es el país más golpeado del mundo por la COVID-19, con más de 2.420.000 casos confirmados y 124.000 muertes. Es probable que la nueva decisión del Supremo sobre el «Obamacare» no llegue hasta 2021, después de las próximas elecciones presidenciales.
Trump había prometido en campaña desmantelar «Obamacare» con el lema «derogar y reemplazar», pero sus intentos fracasaron en el Congreso tras una dramática votación en la que el fallecido senador republicano John McCain apoyó la ley de Obama, el legado más preciado del exmandatario.
El Alto Tribunal ha fallado ya en dos ocasiones a favor de «Obamacare», en 2012 por cinco votos a cuatro, y en 2015 por seis a tres. En ambas ocasiones, el juez conservador John Roberts votó junto a los cuatro progresistas para decantar la balanza del tribunal. En el caso de 2015 también votó a favor de «Obamacare» el conservador Anthony Kennedy, sustituido recientemente por Brett Kavanaugh.