Aragón se queda sin unidad de 'long covid' y deja sin asistencia adecuada a 600 pacientes
Formadas por equipos multidisciplinares, Andalucía, la Comunidad Valencia, Madrid o Canarias cuentan ya con varias de ellas
Poco a poco, las unidades de covid persistente en los hospitales van aumentando. Creados para tratar de la mejor manera posible a los pacientes que siguen sufriendo la enfermedad tras dos años de pandemia, están formados por equipos multidisciplinares, que permiten el abordaje, el tratamiento y la atención integral de los pacientes afectados. Comunidades como Andalucía, la Comunidad Valencia, Madrid o Canarias cuentan ya con varias de ellas, sin embargo, denuncian los pacientes afectados, Aragón se encuentra a la cola en materia de long covid y se queda sin una de estas unidades a pesar de las dos PNL votadas en las Cortes de Aragón en junio y noviembre de 2021, de la aprobación de otra PNL para la revisión del protocolo de atención a los pacientes con covid persistente en la Comisión de Sanidad del pasado día 4 de febrero de 2022, así como de las recomendaciones de la Justicia de Aragón aceptadas por el Departamento de Sanidad.
De esta forma, desde la Asociación Long Covid de Aragón, aseguran a THE OBJECTIVE que más de 600 personas se van a quedar sin una asistencia sanitaria adecuada, un 10% de todos los infectados por el virus del SARS-CoV-2 en Aragón, sumando ya 26 meses de letargo institucional. «Los responsables del Departamento de Sanidad con los que nos reunimos, tras enmiendas restrictivas del cuatripartito PSOE-Podemos-PAR-Cha, se aferran a que en otras comunidades no está funcionando, y esto es totalmente falso. Por decirlo de alguna manera, en comunidades como Castilla la Mancha están muriendo de éxito», asegura la presidenta de esta asociación en la comunidad aragonesa, Delphine Crespo.
Y es que lo cierto es que la primera unidad de atención a los pacientes long covid de Castilla la Mancha anunciaba hace poco en prensa que ya había atendido con éxito a 500 pacientes, dividiéndoles incluso en subgrupos según su afectación, tal y como llevan funcionando también en la unidad covid persistente de Can Ruti (Hospital Germans Trias i Pujol) de Badalona desde el año 2020. Además, Emiliano García-Page, presidente de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, anunciaba de hecho la ampliación de las consultas de long covid a «todos los hospitales de la región» desde el 1 de marzo de 2022. Y en Andalucía hay cuatro hospitales que ya cuentan tanto con la unidad poscovid como la de covid persistente, tres en Málaga y uno en Sevilla; además, según ha podido saber THE OBJECTIVE, el Hospital Universitario de Jerez de la Frontera está pendiente de la apertura de una unidad.
Ni coordinador ni consulta específica de rehabilitación long covid
De esta forma, los pacientes de Aragón, ante el «abandono» y el «bloqueo» de la administración y con una atención primaria «desbordada» que hace todo lo posible por intentar ayudar a esto enfermos pero, sin embargo, «no tiene prácticamente medios para hacerlo», han propuesto la creación de la figura de coordinador en los centros de salud para agilizar la atención de estos pacientes. De hecho, la consejera de Sanidad Sira Repollés anunció en la Comisión de Sanidad del 5 de noviembre de 2021 su compromiso para la creación de este especialista en cada centro sanitario. Siete meses después sigue sin aplicarse.
«Tampoco se han tenido en cuenta las recomendaciones de El Justicia de Aragón, aceptadas por el Departamento de Sanidad, entre las que se pedía mayor colaboración por parte del Departamento de Sanidad con las asociaciones de pacientes, y agilizar los tiempos de espera entre pruebas médicas y visitas a especialistas hospitalarios», critican de la Asociación Long Covid de la comunidad aragonesa. «Actualmente, las derivaciones que consiguen los pacientes no revisten carácter urgente ni preferente, por lo que, para pruebas sencillas, los tiempos de espera oscilan entre seis y nueve meses mínimo», aseguran.
Por último, denuncian, «se nos ha negado también la posibilidad de crear una consulta específica de rehabilitación para pacientes long covid» -como recientemente se hizo en Gran Canaria–, «alegando que ya se nos estaba atendiendo». En la actualidad, en Aragón, muy pocos pacientes long covid logran acceder a estas consultas de fisioterapia cardiorrespiratoria, aseguran, aunque a los pacientes covid con secuelas sí se les deriva. «El resto no recibe ninguna ayuda de tipo fisioterapéutico, a pesar de que se hace cada vez más patente que una rehabilitación individualizada y monitorizada contribuye a mejorar la calidad de vida de los pacientes que padecen covid-19 persistente».
Es el caso de P.J.E., una aragonesa de 48 años que prefiere guardar el anonimato ya que se encuentra en búsqueda de empleo y sufre más de una decena de síntomas tras contagiarse de covid en marzo de 2020. Y es que más de dos años después, sigue con fatiga, disnea, cansancio extremo, taquicardias, inflamación de la cadera, fuerte dolor de ingles y sacro, quemazón en la planta de los pies, hematomas en los dedos, tobillos hinchados, daños vascular…
Con todo esto, cuenta P.J.E a THE OBJECTIVE, ella acude a rehabilitación una vez por semana para liberar la tensión del diafragma y para sus inflamaciones de cadera, ingles y lumbares. Sesiones que ascienden a 35 euros la hora y que debe pagar de su bolsillo ante la imposibilidad de recibirlas por la Seguridad Social.
«No tenemos manera de diagnosticar ni tratar»
Una de las mayores quejas de los enfermos de covid persistente es el periplo al que se ven sometidos al tener que ir de especialista en especialista para tratar cada sintomatología. Con más de 200 secuelas diferentes, no es difícil encontrar personas con más de 40 ó 50 síntomas sin diagnóstico que agotan su paciencia y minan su moral entre consultas y médicos «que no te escuchan porque no saben cómo tratarte». Una situación, según los expertos consultados, que se acabaría con la creación de unidades de long covid en, al menos, cada provincia, formadas por profesionales con el suficiente estudio y manejo de la enfermedad para tratar a los afectados. Y es que ahora, en muchos hospitales, lo que está ocurriendo, según cuenta a THE OBJECTIVE la doctora Ana Moragas, portavoz de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, es que los facultativos están tratando los síntomas, pero no la enfermedad, porque «no tenemos manera de diagnosticar ni tratar».
«Mucha gente no está concienciada con este tipo de clínica persistente. Es algo nuevo y todos nos tenemos que acostumbrar a que existe», explica la doctora Moragas, que dice que lo único claro es que «no es necesario haber pasado un covid muy grave» para desarrollar esta enfermedad. «Sí hay estudios de que los vacunados tienen menos long covid. Parece que con la vacuna sí que disminuye», agrega la experta.
Por ello es que la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria y la asociación Long Covid ACTS han desarrollado una guía clínica para la atención del paciente long covid o covid persistente para «visibilizar la enfermedad». El 10% de los infectados con síntomas pueden tener una clínica persistente, esto es, sobre un millón de personas en España.