La mitad de los médicos extranjeros en Cataluña trabaja sin homologar su especialidad
Muchos de estos facultativos están recibiendo demandas por intrusismo profesional ante su situación de pseudolegalidad: «Nos están baboseando»
La situación de los médicos extracomunitarios en España cada vez se hace más insostenible. Regados por toda la España vacía para paliar las dificultades de los sistemas sanitarios y cubrir plazas de especialidades deficitarias, en Cataluña, única comunidad donde existe sección colegial que representa a médicos extracomunitarios a través del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona y el Colegio Oficial de Médicos de Tarragona, se estima –ya que no hay datos oficiales aportados por la Consejería– que cerca del 50% de los médicos extranjeros trabaja sin la especialidad homologada.
No obstante, estos colegios aseguran a THE OBJECTIVE que es una práctica extendida por toda España, sobre todo, en zonas rurales, «donde los MIR no quieren ir». «El Gobierno y las administraciones nos están baboseando y mareando la perdiz», cuenta una fuente afectada que prefiere mantenerse en el anonimato, «no hay ni interés ni económico ni político en que esto se resuelva, porque sencillamente los médicos extracomunitarios somos petróleo barato», agrega este facultativo, que tras más de 30 años ejerciendo la especialidad de traumatología en un hospital español no ha podido aún homologarla. Además, asegura que en su centro hospitalario más del 70% de médicos especialistas son extracomunitarios.
En este mismo sentido se pronuncia otro facultativo venezolano en este periódico, que afirma que en su clínica hay unos 18 médicos extracomunitarios ejerciendo alguna especialidad, de los cuales solo cinco la tienen certificada. Igual ocurre en los hospitales de Linares (Jaén) y Ronda (Málaga). En el primero se encuentran ejerciendo alguna especialidad 35 médicos extracomunitarios. Lo mismo tiene lugar en hospitales y centros sanitarios de Extremadura y buena parte de Valencia. Y en Ibiza, según los últimos datos ofrecidos por el Colegio Oficial de Médicos de Illes Balears, 34 de las 42 plazas de Urgencias y Pediatría están cubiertas por estos profesionales.
Situación de pseudolegalidad
De esta forma, estos médicos extranjeros, que durante la pandemia sí pudieron ser contratados sin el MIR ante la escasez de personal -amparados en el Real Decreto-ley 30/2021, de 23 de diciembre de 2021 (vigente hasta diciembre de 2022)–, son contratados como «médicos generales» y, en muchos casos, adjuntos al Servicio que corresponda. Así, ejercen su labor de especialista sin que en su contrato aparezca el término especialista. Y ahí la trampa. «Es una situación de pseudolegalidad que no es justa y que a nadie le interesa» y que crea problemas jurídicos bastantes serios, hace hincapié una de las fuentes consultadas, que denuncia además «la desventaja» con la que trabajan: «Los contratos son temporales sin opción a ascender dentro del hospital y en cualquier momento nuestro puesto puede ser ocupado por un MIR o por cualquier otro médico que reúna todos los requisitos».
Y es que certificar la especialidad en España es toda una misión imposible. Las últimas pruebas de homologación extracomunitaria para médicos fueron realizadas en febrero de 2023. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad llevaba desde 2019 sin convocar ninguna prueba teórico-práctica para el reconocimiento de estos títulos extracomunitarios. Anteriormente, tuvieron lugar en 2012, cuando solo aprobó el 20%. No obstante, presentarse a estas pruebas ya es una suerte, ya que las fuentes consultadas aseguran a THE OBJECTIVE que el 90% casi de los especialistas que introducen sus papeles para ser certificados, cuando pasan al Ministerio, les dicen que no tienen derecho «porque no tienen los años».
Denuncias por intrusismo profesional
Ante este panorama, muchos de estos facultativos, algunos incluso con más de 20 años adjuntos a diferentes servicios de hospitales de la España vacía sin poder certificar su especialidad, ahora están siendo denunciados por sus propios compañeros que «aprovechan esta situación de alegalidad» para demandarlos. Es el caso de dos médicas en Extremadura, acusadas por una matrona de «trabajo ilegal», se sienten «abandonadas» por los Colegios de Medicos, el Ministerio de Sanidad, las Administraciones y el propio hospital que en su día se vio obligado a contratarlas en esta situación de pseudolegalidad porque no tiene médicos especialistas. «Ellas están ahora ante la mayor indefensión», relatan varios afectados a este periódico.
Situación similar es la sufrida por un traumatólogo de un hospital del sur de Tarragona, que también prefiere mantenerse en el anonimato. Tras más de cinco años adjunto al servicio de Traumatología, el pasado mes de mayo recibió una citación judicial que le obliga a comparecer el próximo julio acusado de intrusismo profesional, cuenta el propio afectado a THE OBJECTIVE.
«Nos están baboseando y mareando la perdiz», relata una fuente afectada que recuerda como un diputado del Partido Socialista de Tarragona le dijo «muy claramente»: «Doctor, esto no se va a arreglar porque esto no es una noticia que esté en la mesa del Gobierno y mientras no sea una noticia que cause escozor para el Gobierno, nadie va a hacer absolutamente nada», recuerda el médico, que defiende que la certificación no sea una valoración burocrática del Ministerio, sino de los Colegios de Médicos. «Pedimos que sean los Colegios Médicos los que certifiquen si tienes la capacidad de especialista, como se hace en todo el mundo», agregan los afectados, que aseguran que la certificación en Estados Unidos y en toda América Latina de las especialidades la dan los propios colegiados.