Muere otro niño inmigrante bajo la custodia del Gobierno de Estados Unidos
Un niño inmigrante originario de Guatemala que estaba bajo custodia del Gobierno de Estados Unidos murió el día de Navidad en un hospital del estado de Nuevo México
Un niño inmigrante originario de Guatemala que estaba bajo custodia del Gobierno de Estados Unidos murió el día de Navidad en un hospital del Estado de Nuevo México después de haber cruzado irregularmente la frontera con México, informa la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
Se trata de la segunda muerte de un menor inmigrante en Estados Unidos. A principios de mes, una niña de siete años, también de Guatemala, falleció cuando se encontraba bajo custodia de las autoridades migratorias de EEUU, supuestamente por deshidratación y tras haber cruzado ilegalmente la frontera a través de una zona desértica del estado de Nuevo México.
En un comunicado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza detalla que el pequeño murió pasada la medianoche y por causas que aún se desconocen.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala ya ha solicitado una investigación completa y el acceso a los registros médicos del niño fallecido. La causa de la muerte «está en investigación», informa el ministerio, que ya pidió una explicación sobre la muerte el 8 de diciembre de la menor Jakelin Caal Maquín, quien 48 horas después de haber sido detenida junto a su padre en la frontera de EEEUU murió en similares condiciones.
El cónsul de Guatemala en Phoenix, Óscar Padilla Lam, «está ya en el seguimiento de este hecho y se ha trasladado hasta el lugar donde está a la espera de poder entrevistar al padre del menor, para poder conocer su versión de los hechos».
Según detalla la Oficina de Aduanas en su comunicado, el pequeño comenzó a mostrar signos de «una posible enfermedad» el lunes mientras estaba bajo custodia de los agentes fronterizos.
Uno de los agentes observó que el niño no se encontraba bien y, a continuación, fue trasladado con su padre al Hospital Gerald Champion Regional, en la ciudad de Alamogordo, que se encuentra en el Estado de Nuevo México y en el desierto de Chihuahua.
Una vez en el hospital, los médicos determinaron que el niño sufría un resfriado común y, cuando iban a darle el alta, se dieron cuenta de que tenía fiebre y el menor estuvo en el centro médico otros 90 minutos en observación hasta que, finalmente, el equipo médico le dio el alta en la tarde del lunes y le prescribieron ibuprofeno y amoxicilina.
Anoche, el pequeño comenzó a tener náuseas y vómitos, de forma que los agentes migratorios decidieron volver a trasladarlo al Hospital Gerald Champion Regional, donde el niño murió poco después de la media noche.
Como es habitual en estos casos, el Departamento de Seguridad Nacional, que controla la política migratoria y supervisa la Oficina de Aduanas, informó de la muerte del menor al Congreso y al inspector de su departamento, una entidad que puede iniciar una investigación interna sobre lo ocurrido.
El Gobierno de Guatemala también ha sido notificado y, actualmente, está prestando asistencia a la familia del niño, informa Efe.