Despedido un policía en EEUU por pegar a un hombre negro en un control de tráfico

Un policía de Georgia, Estados Unidos, ha sido despedido tras ser grabado en vídeo golpeando repetidamente a un hombre negro durante un control de tráfico, según han informado las autoridades.

Por qué es importante: las protestas contra el racismo y el abuso policial se han sucedido en Estados Unidos y extendido a otras partes del mundo tras la muerte de George Floyd a manos de un policía blanco, a la que siguieron la de Rayshard Brooks y el caso de Jacob Blake, que fue disparado siete veces por la espalda por agentes de la Policía. 

El agente ha sido despedido por «un uso excesivo de la fuerza», según ha explicado la oficina del sheriff del condado de Clayton, que no ha identificado al agente, pero ha asegurado que se ha puesto en marcha una investigación.

Roderick Walker, de 26 años, fue detenido y golpeado el viernes después de que los agentes lo sacaran del vehículo en el que iba con su novia, su hijo de cinco meses y su hijastro por llevar una luz trasera rota, según ha explicado el abogado Shean William.

Tras pedir su documentación, Walker preguntó por qué era necesario, ya que él no iba conduciendo el vehículo, tras lo que le hicieron salir del coche. Los dos agentes comenzaron a golpear repetidamente a Walker, mientras eran grabados y la novia de Walker pide a gritos que paren y asegura que el detenido no puede respirar. En el vídeo se oye además cómo desde el coche un niño pequeño llama a «papá».

Mientras lo esposan, el policía asegura a la persona que lo está grabando que Walker le ha mordido, algo que el detenido y su abogado niegan que ocurriera. El abogado asegura, además, que Walker perdió la consciencia al menos dos veces durante la paliza, que le ha dejado marcas en la cara.

Según el informe oficial, Walker fue detenido por obstruir la labor de los agentes. Su abogado ha pedido que sea puesto en libertad bajo fianza y ha pedido que se revise el caso, en el que considera que «se han violado los derechos de un hombre afroamericano por parte de la gente y los agentes de la ley, que tienen la obligación primero de proteger y servir».