Las organizaciones de DDHH instan a «poner fin inmediato a las esterilizaciones forzadas» de mujeres migrantes en EEUU
Jeff Amy | AP
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se ha hecho eco de la denuncia de una enfermera del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) sobre esterilizaciones forzadas y negligencia médica contra mujeres migrantes en un centro de detención de Georgia y ha señalado su «grave preocupación» ante estos hechos.
En contexto: varias organizaciones defensoras de los derechos civiles presentaron el pasado 14 de septiembre una queja ante la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) basada en el testimonio de Dawn Wooten, una enfermera que trabajó en una prisión para indocumentados de Irwin (Georgia) y que había denunciado una serie de «prácticas peligrosas», entre ellas la extirpación del útero de varias mujeres. La representante federal por el estado de Washington Pramila Jayapal ha denunciado que al menos 17 mujeres fueron sometidas a cirugías innecesarias, incluyendo histerectomías.
Las condiciones en los centros de detención de inmigrantes han estado bajo el escrutinio público a raíz de las denuncias, el año pasado, sobre hacinamiento y las condiciones en las que permanecían menores migrantes separados de sus padres. Ahora, la CIDH ha publicado un comunicado en el que señala que el Estado tiene que velar por la integridad de las personas bajo su jurisdicción. Por su parte, el canciller mexicano Marcelo Ebrard ha señalado que su país mantiene contacto «con ya seis (mexicanas) de las que potencialmente podrían haber estado sujetas a este tipo de procedimiento (…). Es algo inaceptable que rechazamos de antemano».
La CIDH, organismo encargado de la promoción y protección de los derechos humanos en las Américas, ha instado al Estado a «poner fin inmediato a las esterilizaciones forzadas, investigar de forma diligente a los hechos, sancionar a las personas responsables y tomar medidas de no repetición, garantizando el acceso efectivo a la justicia de las personas afectadas». El Estado, tal y como señala la entidad, debe obtener el consentimiento previo antes de realizar cualquier intervención médica, incluida la esterilización quirúrgica.
Por su parte, Jaypal ha expresado que recibió la información de tres abogados que representaban a mujeres que habían estado recluidas en el Centro de Detención de Irwin (Georgia) y sometidas a «procedimientos invasivos y forzados por un ginecólogo» vinculado a esa prisión.
Jayapal y sus colegas Jerrold Nadler, Judy Chu y Zoe Lofgen han encabezado una petición de 173 congresistas en la que urgen a la Oficina del Inspector General del DHS a abrir una investigación inmediata sobre las denuncias de histerectomías.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha anunciado que abrirá una pesquisa independiente sobre las denuncias. Por su parte, Ada Rivera, directora médica del Cuerpo de Servicios de Salud de la agencia, ha puntualizado en una declaración enviada a Efe que el ICE, sin embargo, «disputa con vehemencia la implicación de que los detenidos sean utilizados para procedimientos médicos experimentales».
