El sindicato de enfermería SATSE ha convocado una huelga indefinida en toda la sanidad pública madrileña a partir del 7 de octubre. En total están llamados casi 30.000 profesionales de Atención Primaria, hospitales, SUMMA 112 y residencias de mayores públicas. Mientras, la situación epidemiológica en Madrid pende de un hilo y se han ampliado a 45 las zonas sanitarias en las que se aplican restricciones de movilidad.
Por qué te lo contamos: la convocatoria, presentada el pasado viernes, tiene por objetivo dar «una solución a los numerosos problemas que afectan a los usuarios en los diversos ámbitos asistenciales y que llevan tiempo sin querer solucionarse», ha indicado el sindicato en un comunicado.
Entre los motivos de la huelga se encuentran «las plantillas reducidas a la mínima expresión, la falta de estabilidad en el empleo, la imposibilidad de contar con bolsas de empleo transparentes o la nula creación de nuevos puestos de trabajo que se traducen en largas listas de espera o el abandono de muchas de tareas», han destacado desde SATSE.
Una huelga que «ya no podía esperar más, tras años de desplantes de las Administraciones Públicas que ignoran reiteradamente las demandas de las profesionales de Enfermería y Fisioterapia y que perjudican gravemente la salud de nuestros vecinos. Con esta huelga exigimos un respeto que se nos niega como profesionales y que se deje de maltratar a los madrileños a los que atendemos».
La secretaria general de SATSE, Teresa Galindo, ha señalado que desde el sindicato siempre se ha buscado «la negociación y lo hemos intentado con mayor intensidad en los últimos meses pero únicamente hemos recibido buenas palabras. Exigimos que se sienten a negociar, de verdad, sin dobleces y pensando en los madrileños».
En palabras de Galindo se necesitan «centros de Salud que funcionen, que den respuesta a nuestros crónicos y, también, a aquellos que pueden padecer coronavirus[contexto id=»460724″]. No podemos permitir dejar morir a miles de madrileños simplemente porque no se les atiende o se demoran los días en los cuidados que están reclamando. Hoy muchos fallecidos son por COVID-19, mañana lo serán porque sus patologías crónicas no han sido atendidas como debieran».
«Nos pedían una carta blanca que no les podemos dar ya que los problemas que afectan a los profesionales de la Comunidad de Madrid repercuten gravemente a los usuarios» ha dictaminado la enfermera.
«La tercera ola de la COVID-19 llegará, antes o después, y la sanidad madrileña no está preparada para ella. Si llega nos va a pillar con enfermeras desmotivadas, cansadas o que, simplemente, han abandonado la profesión o se han ido a otras regiones donde las tratan mejor», ha reiterado Galindo.
