La Sociedad de Médicos de Atención Primaria (Semergen) ha traslado a Sanidad su «preocupación» ante la inminente vacunación contra el coronavirus. En palabras de los sanitarios, la mayoría de los profesionales no ha recibido formación de cómo tienen que afrontar el proceso «para que este se realice con todas las garantías», tanto para los pacientes como para los sanitarios. Así, han reclamado medios para administrar las dosis.
Lo más importante: la estrategia de vacunación del Ejecutivo comenzará el 27 de diciembre. Se prevén tres etapas —dependiendo de la disponibilidad de las dosis— y 15 grupos diferentes de población. La vacuna será gratuita y voluntaria. En total, 2,5 millones de personas se inmunizarán gradualmente durante el primer trimestre del año 2021.
En un comunicado, Semergen ha advertido que en un proceso de vacunación sin precedentes, «debe de establecerse una planificación logística, de distribución de material y con equipos de administración vacunal que estén a la altura de los acontecimientos». Además, han asegurado que la vacunación de la COVID-19[contexto id=»460724″], como en el resto de vacunas sistemáticas, debe ser parte de la cartera de servicios de Atención Primaria, «pero con una dotación de recursos humanos y materiales adecuados en base a las necesidades y retos que hay que afrontar».
En palabras de los médicos, es importante que desde la Administración emane «un argumentario sólido, sustentado en las evidencias científicas, para poder informar a los ciudadanos cualquier duda que les pueda surgir sobre la vacunación y su proceso, así como los posibles efectos adversos de la misma». Se trata, en definitiva, «de dar mensajes sólidos y unitarios que aumenten la confianza de la población en la vacunación».
Esta sociedad, decana de la Atención Primaria de España, ha resaltado «la necesidad de tener espacios claramente diferenciados del circuito habitual del centro de salud para no desatender a las actividades de atención a crónicos y las actividades comunitarias». Los sanitarios han expresado al Ministerio de Sanidad su disponibilidad «desinteresada» para asesorar y ayudar en todo lo que sea necesario.