España tiene más médicos por habitante que la media de los países desarrollados
Con 55 facultades, es el segundo país con más universidades de Medicina. Esto ha hecho que cada año unas 7.000 personas se gradúen en esta carrera
«En España no hay médicos». Es una de las cantinelas más repetidas en los últimos meses. Sin embargo, tal afirmación, en cuanto se ponen los datos sobre la mesa, cae por su propio peso. Porque España cuenta con más médicos que nunca y con más facultativos que la mayoría de los países del mundo. En concreto, hay 4,33 médicos por cada 1.000 habitantes, por encima de la media de los países desarrollados agrupados en la OCDE (3,6), adelantando a estados como Italia (4,15), Australia (3,94), Islandia (3,93), Francia (3,37), Finlandia (3,33), Holanda (3,31), Canadá (2,8) o Japón (2,5). Lideran el ranking Grecia, Portugal, Noruega y Alemania, según el Global Health Security Index.
Además, es el segundo país del mundo con más facultades de Medicina por millón de habitantes. Solo nos adelanta Corea del Sur. Y es que en los últimos años, los lugares donde se imparte esta carrera en nuestro país han aumentado exponencialmente. En solo 15 años hemos pasado de 28 a 55 facultades. Esto ha hecho que cada año unas 7.000 personas se gradúen en Medicina, según datos de la OMC. Y, además, a raíz de este fenómeno, en 2022 se ha batido un máximo histórico de matriculados: 8.777 alumnos.
Entonces, expuesta la situación, ¿qué está pasando realmente en España cuando es, en estos momentos, un productor masivo de médicos?
«En España no faltan médicos. Con más facultativos que nunca, lo que faltan son especialistas», señala a THE OBJECTIVE Vicente Matas, coordinador del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, que agrega: «De las facultades de Medicina salen 7.000 médicos anuales, pero a esos médicos hay que especializarlos porque en España no se puede trabajar en la sanidad pública sin especialización». Y ahí está el embudo. Porque esos 7.000 médicos que se gradúan anualmente, tienen que ser residentes MIR. Sin embargo, muchos no tienen esa opción porque las plazas MIR son limitadas.
En 2022 se ofrecieron 8.188 plazas MIR. No obstante, se presentaron 13.059 aspirantes. Esto quiere decir que casi 5.000 médicos terminaron la facultad sin opción a especialidad. Por lo que España está produciendo médicos a mansalva y muchos de ellos ni siquiera tienen opciones de trabajo en la Sanidad Pública, cuando en los próximos cinco años los sindicatos estiman que se van a jubilar 50.000 profesionales. Según datos de la Organización Médica Colegial (OMC), existen unos 270.000 médicos colegiados, de los que solo 136.000 trabajan en el sistema público.
«En las tres últimas convocatorias han empezado a incrementar las plazas MIR, pero estos médicos no terminarán hasta dentro de cuatro o cinco años. Y los que han empezado este año la carrera, para cuando terminen la especialidad, estaremos en el año 2034 o 2035, por lo que ya vamos tarde», explica el experto, que lamenta que no haya «nadie al timón que haga una planificación a medio-largo plazo, como requiere esta profesión tan compleja y que necesita tantos años de formación».
España, fábrica de médicos para Europa
A pesar de que en los últimos años se ha aumentado el número de plazas MIR, 2018 (6513), 2019 (6797), 2020 (7512), 2021 (7.989) y 2022 (8.188), no todas las plazas se terminan cubriendo. En 2022, por ejemplo, 97 se quedaron desiertas. Nadie las quería. Una cifra que llama la atención si la comparamos con los 44 que la rechazaron en 2o17 o los 54 de 2018. En el año de la pandemia fueron 113. Esto es, en cuatro convocatorias los rechazos se han multiplicado por casi cinco.
Y, ¿por qué está ocurriendo esto? Según explica el Dr. Julio Armas Castro, España es de los países europeos que peor paga a sus MIRes. Un residente de primer año gana 1.245 euros brutos al mes, en Portugal ganan 1.600 euros al mes, 2.600 en Bélgica y casi 5.000 en Alemania.
Por otro lado, en los últimos años la situación laboral se ha precarizado y los sueldos de los médicos –al igual que en el resto de profesiones– han perdido poder adquisitivo, de forma que la diferencia entre el sueldo médico alemán y el español es de 109.000 euros. Bélgica, Dinamarca e Italia cuadruplican el sueldo medio del médico de hospital en España. Y a esto hay que sumar que seis de cada diez facultativos sufren el síndrome del trabajador quemado (burnout) .
Las consecuencias: España se ha convertido en un exportador masivo de médicos a Alemania o Reino Unido y unos 11.000 médicos españoles se han ido al extranjero en tan solo cinco años. Y esto le viene muy bien a determinados países que se rifan a los facultativos españoles: profesionales bien formados, jóvenes y comprometidos con los valores del profesionalismo. Recientemente, se hacía viral una oferta en Irlanda como médico de urgencias, para la que pedían cuatro años de experiencia, 39 horas de lunes a viernes y un salario que podía llegar a los 200.000 euros.
Ante esta situación, Vicente Matas espera que Comunidades Autónomas y Ministerio de Sanidad «se pongan a hacer números» y «planifiquen» las necesidades de futuro. Si esto no pasa, la única explicación «lógica», concluye el experto irónicamente, es que el Ministerio «lo que pretende es formar a muchos médicos para poner una oficina de exportación de facultativos españoles a otros países que los tratan mejor».