'Vis a vis' con su perro: un preso de la cárcel de Álava podrá despedirse antes de sacrificarlo
En su anterior prisión, en San Sebastián, no le concedieron su petición
Un juez de Bilbao ha autorizado que un interno del Centro Penitenciario de Álava pueda despedirse de su perro en un ‘vis a vis’, con motivo de que éste ha de ser sacrificado. Queda pendiente que el preso demuestre mediante documentos que su mascota está realmente enferma, según ha informado EFE.
A principios de este verano, un preso que se encontraba en la Prisión de Martutene (San Sebastián) y que actualmente se encuentra en el Centro Penitenciario de Álava, solicitó que se pudiera encontrar en un ‘vis a vis’ con un sorprendente visitante: su propio perro.
Sin embargo, las autoridades del Centro Penitenciario de Martutene rechazaron esta petición, con motivo de que, entre sus normas, figuraba la prohibición de tener contacto en la cárcel con animales de compañía. Más tarde, fue trasladado a la Prisión de Álava, lugar en el que continúa como interno actualmente.
Por suerte para él, apareció en escena el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 del País Vasco, con sede en Bilbao, quien autorizó el encuentro con la mascota, aceptando que el preso alegase que su perro se encontraba muy enfermo y que debía de ser sacrificado. Ahora, con esta autorización judicial, así como los permisos de las autoridades del Centro Penitenciario de Álava, el sujeto espera impaciente el encuentro con su animal de compañía, con el fin de despedirlo.
Lo único que le queda a este preso para que pueda llegar ese día es presentar documentos verídicos que acrediten que su perro se encuentra realmente enfermo, y que ha de ser sacrificado próximamente. Una vez se acepten esos papeles, la cárcel de Nanclares de la Oca, el Centro Penitenciario de Álava, será testigo de una bonita e inhabitual despedida.