El reto de la ortografía: ¿están preparados los estudiantes para la nueva EBAU?
Los adultos también cometen diariamente fallos al expresarse de manera escrita
Varios profesores reparten exámenes para realizar las pruebas de acceso a la universidad. | Edu Botella (EP)
La nueva Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) trae importantes cambios. Las faltas de ortografía bajarán un 10% la nota en los exámenes. Los jóvenes españoles se enfrentarán a este reto en 2025, pero, según los profesionales del mundo de la educación, ellos no son los únicos que deberían intentarlo. Los adultos también cometen diariamente fallos al expresarse de manera escrita.
«Se puede comprobar perfectamente en las secciones de comentarios de muchos medios de comunicación con audiencias que no son jóvenes», explica Javier Arroyo, cofundador de Smartick -método online de aprendizaje- en conversación con THE OBJECTIVE. «Lo podemos ver cualquiera en mensajes en redes sociales y la confusión que hay con el Haber y el A ver en personas que dejaron atrás la juventud hace tiempo», añade.
Arroyo indica que su empresa cuenta con datos aproximativos que demuestran que la cuestión de los errores ortográficos incluye a diferentes sectores de la población. «En nuestro reto de lectura, comprobamos que los más jóvenes cometen ligeramente más faltas que los más mayores», aclara. «Aún así, los resultados no eran buenos en ningún segmento de edad», dice.
Métodos correctores digitales
«La hipótesis que podemos manejar es que cada vez nos fiamos más de los métodos correctores digitales y, a la vez, aunque leamos más, las lecturas pueden ser de peor calidad», aclara el cofundador de Smartick. «También escribimos más y más rápido mensajes en redes sociales y menos ensayos y redacciones largas», asevera.
Indudablemente, es un tema complejo, al que podrían ser añadidas otras cuestiones como la falta de concentración y de atención. «Como casi todo, es multifactorial», aclara Arroyo.
Por su parte, Antonio Barbeito, CEO y fundador de Mundoestudiante afirma que «la ortografía es la base del idioma y, por tanto, de la comunicación». En una sociedad en la que todo está evolucionando de manera vertiginosa, «a veces nos olvidamos de las cuestiones más básicas», añade.
Barbeito insiste en que «la ortografía es uno de los aspectos más olvidados entre los estudiantes, pero sería impensable que alguien que ocupe un alto puesto directivo no supiera escribir correctamente en su lengua materna».
La cuestión de la lectura
El CEO de esta red de academias de estudio asegura que diariamente comprueba que la ortografía de los españoles está empeorando. «Muchos de los que acuden a Mundoestudiante cometen faltas de ortografía (algunas realmente graves); esto se debe a que actualmente los jóvenes no dedican tiempo a la lectura», explica.
Según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2023, un 74% de jóvenes comprendidos entre los 14 y los 24 años lee habitualmente. No obstante, Barbeito afirma que «la mayoría de las lecturas que estos frecuentan son las que deben realizar para los colegios«. Además, «el uso continuado del móvil y las abreviaciones utilizadas en los chats hacen que presten menos atención a la ortografía», cuenta.
A causa de todo ello, el director de Mundoestudiante considera que los alumnos no están realmente preparados para los cambios de la EBAU. «Con las dinámicas actuales en los colegios, no», sentencia. «En el caso de las asignaturas de letras, para el próximo curso los cambios son sustanciales, ampliando, en algunos casos, el temario de asignaturas teóricas».
Por tanto, la penalización por las faltas de ortografía no será la única nueva medida a la que tendrán que adaptarse los alumnos. La prueba de acceso a la universidad también incluirá como novedad el tipo test. Asimismo, podrán elegir entre distintas preguntas, aunque requerirán que hayan estudiado todo el temario. Así lo refleja el borrador del proyecto de real decreto de la nueva EBAU, elaborado por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes y el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.
«Son varias las preocupaciones de nuestros alumnos de cara a la selectividad», dice Barbeito. «En este curso, nos encontramos con alumnos preocupados principalmente por los nuevos contenidos introducidos, especialmente en las asignaturas de Historia de España y Filosofía», aclara. «Además de esto, les preocupan tanto el tiempo para realizar el examen (actualmente 90 minutos) y tener todos los contenidos estudiados», afirma.
