Por esta razón se llama luna de miel al viaje de los recién casados
Esta expresión que se utiliza para los recién casados se origina en la asociación de dos de los elementos más simbólicos
Luna de miel | Unespash
Los rituales y tradiciones asociados a las bodas provienen de diversas culturas y periodos históricos, fusionándose con el tiempo y persistiendo en la actualidad en la mayoría de las ceremonias matrimoniales.
Las bodas están llenas de tradiciones, desde lanzar el ramo hasta vestir a la novia de blanco. Una de estas costumbres es el viaje que emprenden los recién casados.
Inicialmente, el término luna de miel no hacía referencia a un viaje, sino al mes lunar que seguía a la boda.
Antiguamente, era común que a los nuevos esposos se les obsequiara con una vasija de hidromiel, una bebida hecha de agua y miel.
Esta tradición se creía que les proporcionaba energía para concebir a su primer hijo varón durante los primeros días de matrimonio.
El proverbio árabe señala que el primer mes después del matrimonio es dulce como la miel, pero los siguientes son amargos como el absinto o el acíbar.
Es importante entender que esta primera luna se refiere a un mes lunar de 28 días según el calendario árabe.
¿Qué significa esta expresión?
La luna de miel es un período de intimidad conyugal que sigue inmediatamente después del matrimonio. Es comúnmente conocida como el viaje tradicional que una pareja realiza después de casarse.
Según algunas teorías, el término luna de miel podría ser una traducción literal del inglés honeymoon. El Oxford Dictionary señala que la primera vez que se utilizó este término fue en 1546, en un texto del escritor John Heywood.
Heywood expresó este término en un poema sobre el amor y el arte, asociándolo con un sentimiento de alegría. La segunda aparición fue en 1592, cuando el dramaturgo Robert Greene lo utilizó como honney moone al hablar de dos personas casadas.
Esta expresión se origina en la asociación de dos elementos simbólicos: la miel y la luna. La miel, conocida por su dulzura, representa la fase más feliz y dulce de la relación de pareja.
Además, en inglés, el término honey (miel) se usa como un apelativo cariñoso. Por otro lado, la referencia a la luna se relaciona con el ciclo lunar de aproximadamente un mes.
Así, la luna de miel se refiere al primer mes posterior al matrimonio, simbolizando un período de amor y felicidad intensos.
El origen de la luna de miel
El término luna de miel adquirió su connotación de viaje para los recién casados dos siglos después. La primera referencia que lo relaciona con este significado se encuentra en un texto de 1791 del autor alemán Johann Karl August Musäus.
En este texto, describe cómo una pareja recién casada pasó su luna de miel en Augsburgo, disfrutando de su mutua felicidad y de placeres inocentes, evocando la imagen del primer par de humanos en el jardín del Edén. Y es que el origen se remonta a antiguas tradiciones vinculadas a las celebraciones matrimoniales.
En la cultura babilónica, por ejemplo, era costumbre que el padre de la novia entregara hidromiel al novio durante un mes. Dado que su calendario estaba basado en las fases lunares, es probable que de ahí derive el término luna de miel.
Por otro lado, los antiguos romanos tenían una práctica similar: la madre de la novia solía colocar una vasija con miel en el dormitorio que la pareja iba a ocupar en su noche de bodas.
Es importante señalar que en tiempos pasados se creía que las sustancias dulces tenían el poder de aumentar la fertilidad y brindar buena fortuna a los recién casados.
Entre los teutones, por ejemplo, las bodas solían llevarse a cabo bajo la luz de la luna llena, y durante los 30 días siguientes al enlace, los esposos consumían licor de miel como parte de una tradición auspiciosa.
