Cómo elegir el mejor gazpacho, según la OCU
Los envasados no incluyen pan ni aceite en sus recetas, es una alternativa sencilla y práctica pero no tan nutritiva
Cuál es el mejor gazpacho, según la OCU. | Freepik
En la paleta gastronómica española, el gazpacho es un auténtico héroe del verano, una explosión de frescura y sabor que conquista paladares y reconforta el cuerpo en los días más calurosos.
Más que un simple plato, el gazpacho es una oda a las hortalizas de temporada, un homenaje a la sencillez y una fuente inagotable de nutrientes. Sus ingredientes, unidos en perfecta armonía, nos brindan un deleite culinario a la vez que cuidan de nuestra salud.
¿Cuántos tipos hay?
Lejos de ser una receta que sirve para cualquier momento, la receta del gazpacho tiene muchas versiones, cada una con su propia personalidad. En Andalucía, encontramos el clásico gazpacho, un equilibrio armonioso de tomate, pimiento, ajo, aceite de oliva y un toque de vinagre. En Extremadura, el gazpacho se viste de gala con trocitos de tomate sobre un majado de ajos en aceite, una explosión de texturas y sabores.
Pero el viaje no termina ahí. En La Mancha, el gazpacho se transforma en un guiso sustancioso con carne y tortas de pan, una oda a la cocina tradicional. Y así, cada región, cada hogar, aporta su propia melodía a la partitura del gazpacho.
¿Casero o envasado?
El encanto del gazpacho casero
Para muchos, el gazpacho casero es un tesoro culinario. Un plato que evoca recuerdos de la abuela, de tardes en el huerto seleccionando los tomates más rojos, del aroma inconfundible que inunda la cocina. El gazpacho casero es sinónimo de sabor auténtico, de ingredientes frescos y de una elaboración artesanal que mima cada detalle.
Receta tradicional del gazpacho
Preparar gazpacho casero es sencillo y rápido, solo necesitas ingredientes frescos y de calidad. A continuación, se comparte la receta tradicional para que puedas disfrutar de este manjar en casa:
Ingredientes para 4 personas
- 1 kg de tomates maduros
- 1 pimiento verde italiano
- 1 pepino
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 25 ml de vinagre de Jerez
- 70 g de pan del día anterior (opcional)
- 300 ml de agua fría
- Sal al gusto
Preparación
- Lava bien las verduras. Seca el pimiento, el pepino y la cebolla. Pela los tomates si lo deseas (aunque no es necesario).
- Trocea las verduras. Corta los tomates en trozos grandes, el pimiento en tiras, el pepino en cubos pequeños y la cebolla en trozos medianos.
- Coloca las verduras troceadas en un recipiente amplio. Añade el diente de ajo pelado, el aceite de oliva, el vinagre, el pan del día anterior (si lo usas), el agua y la sal.
- Tritura todo con una batidora eléctrica hasta obtener una mezcla homogénea y sin grumos. Si te gusta el gazpacho con textura, puedes triturarlo menos.
- Cuela el gazpacho con un colador fino para eliminar las pieles y las semillas de las verduras.
- Prueba el gazpacho y ajusta el sabor a tu gusto con sal, vinagre o aceite de oliva si lo deseas.
- Refrigera el gazpacho durante al menos 2 horas antes de servirlo. Lo ideal es servirlo bien frío.
Gazpacho envasado
Sin embargo, la vida moderna no siempre nos permite dedicar horas a la elaboración de un plato, por muy delicioso que sea. Es ahí donde entra en juego el gazpacho envasado. Una opción cómoda y práctica que nos permite disfrutar de este manjar en cualquier momento y lugar.
Pero no te engañes, el mejor gazpacho envasado no es igual que el casero. Pocos consiguen acercarse a un gazpacho casero. La mayoría no incluyen pan en sus recetas, además de que contener muy poca aceite. Sus pocas calorías lo convierten en perfecto si quieres limitar tu ingesta calórica, pero es decepcionante si quieres disfrutar de un plato típico de la gastronomía española.
Beneficios del gazpacho
El gazpacho, más que un simple plato refrescante para combatir el calor del verano, es una fuente de salud y bienestar. Su elaboración a base de hortalizas frescas y de temporada lo convierte en un alimento rico en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, que aportan numerosos beneficios para nuestro organismo:
- Hidratación: al estar compuesto principalmente por agua (alrededor del 90%), el gazpacho es un excelente hidratante natural, perfecto para reponer líquidos y sales minerales perdidos durante el día, especialmente en épocas de calor.
- Vitaminas y minerales: una fuente rica en vitaminas A, C y E, importantes para el sistema inmunológico, la salud de la piel y la vista. También aporta potasio, fósforo, magnesio y calcio, esenciales para el buen funcionamiento del sistema nervioso y muscular.
- Fibra: las hortalizas que componen el gazpacho, como el tomate, el pimiento y el pepino, son ricas en fibra, lo que ayuda a regular el tránsito intestinal, prevenir el estreñimiento y promover la sensación de saciedad.
- Antioxidantes: el gazpacho contiene licopeno, un potente antioxidante que ayuda a proteger las células del daño oxidativo, previniendo enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
- Bajo en calorías: es un plato ligero y bajo en calorías, ideal para quienes buscan mantener un peso saludable o están siguiendo una dieta de adelgazamiento. Un vaso de gazpacho (aproximadamente 250 ml) contiene alrededor de 70 calorías.
