Los animalistas denuncian que Marruecos «extermina» perros callejeros antes del Mundial
El país magrebí podría matar hasta tres millones de animales con el objetivo de «limpiar las calles» para el macroevento
La preparación de Marruecos para acoger, junto a España y Portugal, el Mundial en 2030 está suponiendo un «violento exterminio masivo» de perros callejeros en el país magrebí, según denuncian los animalistas. La International Animal Coalition (IAWPC), compuesta por una veintena de ONG, ha comenzado una campaña de sensibilización por la matanza con envenenamientos y disparos que podría acabar con la vida de hasta tres millones de animales. Solicitan a la FIFA que «condene» el exterminio y exija su fin inmediato al reino alauita o le retire de la organización conjunta del macroevento futbolístico.
La IAWPC, que ha comenzado una recogida de firmas para adherirse a la campaña, denuncia que los perros callejeros están siendo sistemáticamente envenenados con estricnina, «ya sea inyectándola directamente o colocándola en la comida». Señalan además que hay «hombres armados con fusiles y pistolas, ordenados por el Gobierno» que «recorren las zonas urbanas y rurales de Marruecos, día y noche, y disparan a los perros, aunque rara vez consiguen un tiro limpio, por lo que son dejados desangrándose, gritando de agonía, y luego pudriéndose».
«También se persigue a los perros y se les atrapa con dispositivos de sujeción medievales y se les arroja a la parte trasera de camiones con otros perros aterrorizados», abunda la coalición animalista, que asegura que «estos perros son llevados para ser asesinados en dispensarios falsos», lo que significa que «o bien son quemados en incineradores o son llevados y arrojados en fosas comunes. No todos los perros están muertos cuando son abandonados».
Niños traumatizados
Incluso antes del anuncio de la FIFA en octubre de 2023, las autoridades marroquíes ya mataban «con brutalidad» cerca de 300.000 perros callejeros al año, según IAWPC. Esto se hacía, según explica la activista Paula González Carracedo, con el pretexto de «evitar la propagación de la rabia, algo que no tiene ninguna base científica». Para más inri, tras hacerse público que Marruecos sería uno de los anfitriones de la competición deportiva, la masacre se ha visto «dramáticamente incrementada», peligrando la vida de hasta tres millones de animales.
«Estos actos violentos, que se producen a plena luz del día, y a menudo frente a niños, constituyen una grave violación de los derechos de los animales, pero también de la infancia. Los niños no pueden estar expuestos a este tipo de violencia gráfica», abunda González Carracedo, que se ha volcado en redes con la campaña.
La IAWPC llama a los otros dos países anfitriones –España y Portugal–, al patrocinador oficial del Mundial –Qatar Airways– y a la propia FIFA para detener la matanza y proteger a los niños de esta violencia. En este sentido, el Comité de Derechos Humanos de la FIFA se comprometió el 25 de enero de 2024 a incluir a la European Link Coalition (ELC) en una revisión de la candidatura de Marruecos, después de que esta aportara pruebas que demostraban la «brutal persecución» y exterminio de perros esterilizados por parte del reino alauita. No obstante, el país magrebí ha sido ratificado como coanfitrión este miércoles por la FIFA.
En España ya se han sumado a la iniciativa entidades como la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (Faada) o la Plataforma Defensa Animal. El portavoz de esta última, Diego Nevado, asegura a THE OBJECTIVE que «junto a otras entidades animalistas nos estamos movilizando para hacer todo lo que se pueda para parar esta nueva forma de maldad contra los animales»: «Lo que Marruecos está haciendo con los animales es una expresión clara de sadismo, y además podría normalizar en la infancia estas actitudes.».
Nevado considera que detrás de la actitud del reino alauita anida el «especismo, pues el problema es considerar que los animales están a nuestro servicio», y admite que el maltrato animal está normalizado en Marruecos, aunque asegura que no más que en España: «Cierto es que lo tienen muy normalizado, al igual que la fiesta del sacrificio del Cordero, que como antiespecistas lógicamente rechazamos».
Para cuando llegue el Mundial de 2030, que se celebra entre los meses de junio y julio, tres millones de perros callejeros podrían haber muerto con el objetivo de «limpiar las calles». La FIFA ha ratificado a Marruecos como coanfitrión, pero los animalistas exigen que, como mínimo, se exija que finalice con este «exterminio». A la campaña de recogida de firmas se le suma una de concienciación en redes sociales, promovida con el hashtag #stopkillingdogsinmorocco.