Los independentistas catalanes encarcelados piden su acercamiento a Cataluña
Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural, en prisión preventiva desde el 16 de octubre, ha solicitado al Ministerio del Interior el traslado a una cárcel en Cataluña donde vive su familia. Una petición a la que está previsto que se sumen el exvicepresidente de la Generalitatl Oriol Junqueras – encarcelado desde primeros de noviembre – el exconseller de Relaciones Internacionales Raül Romeva y el exconseller de Territorio y Sostenibilidad Josep Rull, también en prisión preventiva por orden del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, que los ha procesado por presuntos delitos de rebelión y malversación de fondos en relación con el procés.
Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural, en prisión preventiva desde el 16 de octubre, ha solicitado al Ministerio del Interior el traslado a una cárcel en Cataluña donde vive su familia. Una petición a la que está previsto que se sumen el exvicepresidente de la Generalitatl Oriol Junqueras – encarcelado desde primeros de noviembre – el exconseller de Relaciones Internacionales Raül Romeva y el exconseller de Territorio y Sostenibilidad Josep Rull, también en prisión preventiva por orden del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, que los ha procesado por presuntos delitos de rebelión y malversación de fondos en relación con el procés.
Las familias de los presos independentistas se están organizando en un «frente común» para pedir al Ministerio del Interior su acercamiento a Cataluña, según publica hoy el diario Ara.cat. En sus argumentos, indican que, una vez dictado el auto de procesamiento no hay motivo para que continúen recluidos en Estremera, Soto del Real y Alcalá-Meco para que puedan pasar a disposición del juez del Tribunal Supremo en cualquier momento.
Cuixart realizó la petición el lunes y, según Ara.cat, está previsto que en los próximos días también lo pidan Junqueras, Romeva y Rull, como parte de una «estrategia coordinada» por el abogado especializado en derecho penitenciario Carlos García Castaño.
Todos tienen hijos menores de edad y consideran que, si no se admitiera la petición, se estarían vulnerando los derechos de los niños a relacionarse con sus padres, reconocidos tanto por la legislación española como por Naciones Unidas. Este es el argumento principal de la petición de Cuixart registrada en Instituciones Penitenciarias, organismo dependiente del Ministerio del Interior.
La defensa del líder de Òmnium entiende que los traslados constantes a la prisión de Soto del Real de su hijo, que solo tiene un año, afectan al menor porque la prisión tiene efectos psíquicos y emocionales.
La compañera de Cuixart, la periodista Txell Bonet, ya lo denunció en la sede de la ONU en Ginebra el mes pasado. «Mi niño de 11 meses y yo hemos viajado 22 veces para que pueda ver a su padre, a menudo solo detrás de un vidrio durante 40 minutos, con contacto físico solo permitido una vez al mes. Hemos recorrido ya 30.000 kilómetros«.
A pesar de que la petición de traslado depende del Ministerio del Interior, fuentes de este departamento aclaran que la última palabra siempre la tiene el juez instructor, en este caso Pablo Llarena, que ya se lo denegó a Oriol Junqueras, informa EFE.