La Fiscalía pide a Brasil la extradición de Carlos García Juliá, uno de los autores de la matanza de Atocha
La Fiscalía ha pedido a la Audiencia Nacional de España que reclame a Brasil la extradición de Carlos García Juliá, detenido el pasado miércoles en Sao Paulo por una matanza terrorista cometida en 1977 en Madrid.
La Fiscalía ha pedido a la Audiencia Nacional de España que reclame a Brasil la extradición de Carlos García Juliá, detenido el pasado miércoles en Sao Paulo por una matanza terrorista cometida en 1977 en Madrid. Justifica esta petición en que considera que la fuga de García Juliá durante un permiso penitenciario interrumpe el período de cumplimiento en prisión, por lo que su condena a 193 años de cárcel no ha prescrito, según un comunicado de esa institución. Esta solicitud debe ser validada por el tribunal y luego por el Gobierno español.
García Juliá y otros cómplices, miembros de un grupo ultraderechista, asesinaron a tiros cinco personas en un despacho de abogados izquierdistas. Se trató de la llamada matanza de Atocha que conmocionó a España en plena transición hacia la democracia y era sacudida por atentados. Los hechos pesaron en la decisión de legalizar al Partido Comunista unos meses más tarde.
Su condena a 193 años de cárcel fue limitada al máximo de 30 años previsto entonces por la ley y en 1991 se le concedió la liberad condicional. En diciembre de ese año obtuvo autorización para viajar a Asunción y trabajar allí, con la condición de presentarse mensualmente ante la Embajada de España en ese país. Al incumplir lo dispuesto y tras ser detenido en Bolivia en mayo de 1996 por narcotráfico, se le revocó la libertad condicional.
España inició entonces un proceso de extradición con Bolivia, que no llegó a fructificar, y el prófugo comenzó un periplo que le llevó también por Chile, Argentina, Venezuela y Brasil, países por los que se movía gracias a tener documentación falsa. García Juliá, de 63 años y que tenía 24 cuando cometió los asesinatos, fue detenido la pasada semana en Brasil, donde había residido desde 2001 con documentación falsa a nombre de un ciudadano venezolano.