Muere el brote de algodón que germinó en la cara oculta de la Luna
Triste noticia para la investigación espacial china. El brote de algodón que se convirtió en la primera planta en nacer en la cara oculta de la Luna ha muerto. No ha podido soportar las bajas temperaturas de la noche lunar, que pueden llegar hasta los 170 grados centígrados bajo cero.
Triste noticia para la investigación espacial china. El brote de algodón que se convirtió en la primera planta en nacer en la cara oculta de la Luna ha muerto. No ha podido soportar las bajas temperaturas de la noche lunar, que pueden llegar hasta los 170 grados centígrados bajo cero.
De esta manera, China pone fin al experimento de la sonda Chang’e 4, que transportaba un recipiente hermético de vidrio de 18 centímetros que contenía aire, agua y tierra además de semillas de algodón, colza, patatas, arabidopsis -una planta de la familia de la mostaza-, huevos de mosca de la fruta y levadura. El propósito era crear una «minibiosfera simple», aunque sólo el algodón prosperó.
No obstante, el experimento les ha servido a los científicos chinos para obtener «una inmensa cantidad de información valiosa», según el diseñador del experimento, Xie Gengxin, que ha señalado a CGTN que el principal objetivo de este experimento era «la popularización de la ciencia«. De hecho, la idea de llevar a la Luna una carga biológica fue seleccionada entre 257 sugerencias realizadas en 2016 por estudiantes universitarios y de institutos del país asiático, informa Efe.
Ahora al sonda ha entrado en reposo hasta que finalice la noche lunar, que equivale a 14 días terrestres. En febrero se volverá a activar y los organismos se descompondrán de manera gradual en el recipiente en el que se llevó a cabo el experimento y no provocarán daño alguno al entorno lunar.
Chang’e-4 transportó el explorador robótico móvil Yutu-2, que ya se separó del alunizador y que explorará el cráter Von Karman. Dispone además de instrumentos aportados por Alemania y Suecia, para participar en experiencias conjuntas sobre el ambiente lunar, la radiación cósmica y el efecto del viento solar sobre la superficie de la luna.
La agencia espacial china planea otras misiones no tripuladas a la Luna, incluyendo una sonda que este año pueda traer muestras lunares de regreso a la tierra. Y es que las aspiraciones científicas de China en la Luna van más allá. El país asiático quiere construir una base de investigación lunar, posiblemente usando tecnología de impresión 3D.