Un nuevo análisis de sangre detecta hasta 50 tipos de cáncer
El análisis ha sido desarrollado a través de un sistema de inteligencia artificial
Un equipo de científicos estadounidenses y británicos ha desarrollado un nuevo análisis de sangre que detecta 50 tipos de cáncer, según publica este martes Annals of Oncology. El análisis se basa en el ADN que pierden los tumores y se encuentra circulando por la sangre, en concreto, se centra en los cambios químicos en el ADN, conocidos como patrones de metilación.
Con este análisis, los investigadores no solo pueden detectar si una persona tiene cáncer, sino que también pueden obtener datos acerca de cuál es el tipo de cáncer que tienen.
El análisis está siendo desarrollado ahora en ensayos clínicos, según explica el doctor Geoffrey Oxnard, del Dana-Farber Cancer Institute de Boston, parte de la escuela médica de Harvard. «Necesitas un análisis como este en un grupo independiente con riesgo de cáncer para mostrar que puedes encontrar el cáncer y tratar de definir qué hacer cuando lo encuentres», explica.
El análisis ha sido desarrollado a través de un tipo de inteligencia artificial, un sistema que selecciona patrones entre los datos y aprende a clasificarlos. El sistema se alimentó inicialmente con las muestras de sangre tomadas de más de 2.800 pacientes. Después se incluyeron los datos de 3.052 pacientes, 1.531 de ellos con cáncer y 1.521 que no tenían cáncer.
Con esta información, el sistema clasificó las muestras en grupos dependiendo de sus patrones de metilación y después se enseñó al sistema a separar los grupos por los tipos de cáncer.
Tras esto, se probó el sistema con muestras de 1.264 personas y se demostró que la inteligencia artificial detectó correctamente a más del 99% de personas que habían sido diagnosticadas de cáncer.
A la hora de identificar un cáncer concreto entre más de 50 tipos, el sistema detectó correctamente que la enfermedad estaba presente el 44% de las veces, con una mayor detección cuanto más avanzada está la enfermedad. En los pacientes en fase I de cáncer, la detección era del 18%, pero subía al 93% en los pacientes en fase IV.
Estos resultados dan esperanza para encontrar una manera de detectar unos tipos de cáncer que a menudo son difíciles de diagnosticar, como el cáncer de páncreas, por ejemplo. Si este análisis se desarrolla lo suficiente, podría ser una herramienta que ayudara a la detección temprana.