'Worldless', el sorprendente videojuego español que dejará a todos con la boca abierta
No hay guion, trama ni diálogos, solo un personaje no manejable que reproduce frases escritas al acercarnos a él
Momento del videojuego 'Wordless'.
Noname Studios es la firma responsable de crear Worldless, esta maravilla independiente desarrollada a fuego lento, como los buenos cocidos. Nada está inventado y se pueden dar vueltas de tuerca a cada una de las modalidades de juego que hay en la industria, siempre y cuando se tengan las ideas claras y se consigan trasladar a la pantalla de forma óptima y efectiva. Estamos ante un título que de primeras nos entra por los ojos en forma de juego de plataformas, con escenarios minimalistas de una belleza extraordinaria y relajante música.
Se basa en una serie de mundos de ensueño diferentes que se comunican, de ambientación fantástica y colorida, pero sobria. No sobra nada, tiene lo justo. Es un sueño en el que encontraremos puertas que nos llevan a diferentes escenarios con el fin de recorrer un mapa unido por puntos, como si representase una constelación celeste. Nuestro personaje es una mujer que mueve su cola de caballo a medida que anda o corre. Es tan minimalista como el resto del juego, al más puro estilo Cutlas, el famoso personaje del tristemente desaparecido Calpurnio.
Es una heroína que acabará desdoblándose para ofrecernos más alternativas jugables. Durante los primeros instantes nos encontramos investigando el escenario y dando los primeros saltitos para acceder a lugares elevados o profundos. No hay guion, no hay trama, no hay diálogos, solo un personaje no manejable que reproduce frases escritas cuando nos acercamos a él. Deberemos ir entendiendo nuestro objetivo a base de ir encontrando figuras con las que poder interactuar en el entorno.
¿Cómo puedo acceder a ese altillo si mi salto no es lo suficientemente grande como para llegar?, ¿qué son esas cosas brillantes suspendidas en el aire? Al final te das cuenta de que si saltas cerca de ellas y pulsas un determinado botón, creas una plataforma flotante para acceder a nuevos lugares. Todo sin prisa, sin marcador de tiempo y pudiendo explorar a un lado y a otro sin las limitaciones del scroll lateral tan presente en los juegos de plataformas.
Es todo un juego en 2D de aventura y exploración, con plataformas ingeniosas y enemigos a batir, además de pinceladitas de RPG. Lo iremos descubriendo poco a poco, pues a medida que vamos avanzando y leyendo los sencillos tutoriales, nos vamos dando cuenta de la tremenda profundidad que posee. En el momento en que nos encontremos con un primer enemigo a batir que nos obstaculice el paso, cambiaremos los movimientos de salto plataformero, aunque los hay de todo calibre, para pasar al momento de combate por turnos en tiempo real.
Primero atacamos con nuestra espada, que es la primera arma de la que vamos a disponer. Lanzaremos cuatro o cinco golpes, depende del tiempo que tengamos para pasar a la retaguardia, y nos dedicaremos a cubrirnos con nuestro escudo. Ahí es donde empezamos a darnos cuenta de que no es un juego sencillo, se empieza a transformar en todo un juego de supervivencia, aunque si nos eliminan podremos volver inmediatamente a la acción con un nuevo combate o retirarnos para afrontarlo más adelante. No existe el game over.
Es un juego de supervivencia en el que deberemos estudiar al enemigo para adivinar qué tipo de ataque va a efectuar, ya sea físico o mágico, con fuego, hielo o electricidad, y pulsar el botón correspondiente del tipo de bloqueo que debamos a hacer en el momento justo. Además, tendremos beneficios si no repetimos combos de ataque. Con un botón bloqueamos los ataques físicos y con otro los mágicos, aunque luego se va complicando la cosa con los ataques combinados.
Para derrotar al enemigo es fundamental ir desgastando su escudo hasta ejecutar un golpe final, si es que su barra de energía está en las últimas, pero no acaba ahí la cosa. El enemigo dispone de un depósito de daño que, conforme le vamos atacando certeramente se va llenando mientras aumenta nuestro poder de envite y la posibilidad de ejecutar la denominada absorción, que nos brinda mejoras para nuestro árbol de habilidades tanto de defensa como de ataque tras completar un código de botones.
Sin embargo, algunos enemigos no nos brindarán fácilmente la posibilidad de absorberlos si les quitamos demasiada vida. Las habilidades cuentan con valores específicos en cuanto al daño normal y al daño de absorción. En definitiva, podríamos decir que tiene de todo: exploración para conseguir mejoras, ingeniosas plataformas que podremos superar una vez hayamos avanzado en el juego suficientemente, enemigos tanto asequibles como complicados de eliminar y, sobre todo, la satisfacción de ir consiguiendo logros sin ningún tipo de ayuda.
Todo esto ocurre en ese mundo misterioso cargado de puertas que se abren para ofrecernos nuevos escenarios que explorar o volver a los que no pudimos exprimir a fondo, ya que nuestro personaje no estaba aún lo suficientemente preparado. Es, en resumen, un título exquisito para que los jugones más cafeteros disfruten sin estrés de un rato relajado, aunque en ocasiones tengan que emplearse a fondo con jefes difíciles de derrotar.
El videojuego va a poner en el mapa del mundo a un pequeño estudio barcelonés de siete entusiastas que no inventan nada, pero que han dado con el tarro de la esencia del videojuego. Worldless está disponible para todas las plataformas.
